Bono señala al pueblo español como el protagonista olvidado de la transición

Madrid, 30 nov.- El presidente del Congreso en funciones, José Bono, ha criticado hoy que se recuerde "uno, dos o tres nombres propios" de la Transición y ha afirmado que el "pueblo español" ha sido el "protagonista olvidado" de este momento histórico.

Bono se ha pronunciado en estos términos en una conferencia y posterior debate en el marco del Congreso internacional "Historia de la época socialista (1982-1996)", que ha tenido lugar en la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional a Distancia.

El ex presidente de Castilla-La Mancha ha criticado que se piense que solo hubo "un capitán" en el cambio de régimen y ha dicho que "la libertad no podía venir exclusivamente de la mano de quienes se habían beneficiado de su ausencia durante cuarenta años".

Ha considerado ésta una de las "paradojas de la transición", junto a la organización autonómica y la figura del Rey, de quien ha puntualizado que, aunque en un primer momento no gozó de la "legitimidad" que "no podía heredar de quien lo nombró", se convirtió en el principal "defensor de las libertades".

Por otra parte, José Bono ha criticado que los socialistas hayan sido "demasiado blandos" en la defensa de algunos valores, "como el nacional", que, ha dicho, "no tiene más fuerza que el de ser referencia de solidaridad".

"Como socialista me emociona mucho más la capacidad de unirnos para superar las adversidades que la emoción de unirnos para gritar la identidad que compartamos", ha aclarado el presidente del Congreso.

Para el presidente del Congreso, la llegada del modelo autonómico a algunos territorios como Castilla-La Mancha "no obedeció a un plan perfectamente previsto, ni fue fruto de una reflexión precisa".

"Algunas comunidades autónomas se encontraron con la autonomía como el que se encuentra tras un tropezón, sin haberla reclamado", ha opinado.

Esta situación, ha dicho, se hace extensible a otras comunidades como La Rioja, Murcia o Madrid, que tuvieron que crear "deprisa" un armazón jurídico y un ordenamiento autonómico.

Aunque ha confesado que durante su vida de estudiante reclamaba "libertad, amnistía y estatuto de autonomía", ha resaltado que se daba por entendido que lo último era para Cataluña y el País Vasco.

"Aún cuando no agrade o no guste", ha dicho, la creación de las autonomías tuvo sus ventajas e inconvenientes, porque se encontró una salida, "pero no fue la solución completa" y ha instado a reflexionar al respecto.