Londres, 30 jun.- El primer ministro británico, David Cameron, condenó hoy la muerte de los tres adolescentes israelíes desaparecidos el pasado 12 de junio, y calificó la acción como un "acto de terror terrible que no tiene excusa".
En un comunicado, el jefe del Gobierno dijo sentirse "profundamente entristecido" por la muerte de los tres jóvenes y resaltó que el Reino Unido respalda a Israel en conseguir que los responsables sean llevados ante la Justicia.
Cameron se solidarizó con las familias de los tres israelíes y dijo que ningún padre debería pasar por tanto sufrimiento.
Los cuerpos de Naftali Frenkel y Gilad Shaar, ambos de 16 años, y de Eyal Yifrach, de 19, fueron hallados cerca de la localidad de Halhul, en Cisjordania.
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