Carlos Morales, el socialista que dijo 'no' a figurar en la lista de Ángel Gabilondo

Carlos Morales es empresario y milita en el PSOE desde el año 2000, pero por lo que quizá sea más conocido es por haber plantado cara a Tomás Gómez en las primarias a la Comunidad de Madrid.

Ya en septiembre, Morales aseguraba a este medio que el suyo era un proyecto "de un grupo de militantes de base con proyección de futuro". En una entrevista el entonces precandidato contaba que en caso de no ganar seguiría mostrando sus convicciones internas en próximos procesos: "El tema no es que se vaya Tomás, el tema es que el partido cambie".

Y desde septiembre, el PSOE ha tenido tiempo de cambiar y seguir anunciando nuevas medidas de cara a los próximos comicios de mayo. Pero, sin duda el cese de Tomás Gómez como candidato a la Comunidad y su sustitución porÁngel Gabilondo a escaso mes y medio para el 24M consiguió reforzar a Sánchez frente a los que pedían cambios inmediatos en el PSM, como fue el caso de Morales.

El socialista ha expresado que "la decisión es una de las más claras apuestas por este cambio de ciclo. La responsabilidad que transmite a la militancia es enorme. No podemos fallar en el presente inmediato, trabajando y aportando lo mejor de todos y todas, para que nuestros candidatos y candidatas obtengan el mejor resultado posible y recuperar, ¡después de tantos años! Madrid".Apuesta por bicefalias y dejarse de liderazgos unipersonales

Aún así, el socialista se muestra crítico con su formación y asegura que"el camino se hace andando, no mirando lo que otros hacen", por ello, fue el único que rechazó un puesto en la lista de Gabilondo como candidato a diputado en la Asamblea de Madrid. Morales reconoce que su decisión fue "muy discutida y apoyada por todo el equipo", pero en estos días de Semana Santa ha colgado a través de su 'Facebook' las razones que le llevaron a decir 'no' al candidato a la Comunidad:

Así el que fue competidor de Gómez asegura que "el nuevo impulso que comenzamos en las pasadas primarias, podría verse mermado y únicamente representado en una posición numérica; sin embargo, esa no es la intención ni la vocación de esta nueva alternativa", para señalar que "entendí que la coherencia del proyecto que encabecé en las primarias del PSM requería un gesto que acercase la nueva política a nuestro partido".

Morales habla de la inercia del cambio realizado en el PSM para que los socialistas levanten el vuelo y se dejen de líos internos, apunta que "si no hay continuidad haciendo que esa inercia nos lleve a un cambio, no sirve más que para un momento determinado y para una causa específica".

"El cambio y la adaptación, son claves para el futuro, más allá de las elecciones, pues cualquier ciudadano en un mundo globalizado (como la ciudadanía madrileña), tendrá experiencias y, por tanto, solicitudes y/o necesidades que quien vive en una burbuja, no comprenderá jamás. Esa es la sensación que ha dado el PSM en los últimos años. Y ello, tal vez, sea porque en muchas ocasiones los representantes del Partido han estado legislatura tras legislatura en los mismos puestos o similares, en las instituciones y se han alejado de la realidad, viviendo en esas burbujas; ahí, sin duda, tenemos la génesis de la desafección de la ciudadanía respecto de los partidos políticos, que no de la política", asegura el socialista.

Morales llama a "modernizar" el partido para no ver siempre las mismas caras en los mismos puestos: "Debemos modernizar el partido, en el momento "procesal" oportuno, pero es proceso ineludible. Para cumplir con los propósitos de un partido socialista y en este sentido, progresista, debemos realizar un nuevo gran consenso y darnos unas nuevas reglas".

Para ello el socialista propone nuevas reglas, "debemos discutirlas abordando debates imprescindibles, como la limitación de mandatos, la no acumulación de cargos, un/una militante un voto, listas abiertas, conformación de listas bajo criterios conocidos previamente y refrendo en las agrupaciones, elecciones primarias abiertas, introducción de medios digitales en las decisiones y elecciones, reglas implacables contra la corrupción…entre otros tantos puntos".

Morales responde así, no al candidato Gabilondo de quien afirma que será "seguro ganador", sino a la vieja política que responde a las ideas que critica y que su partido debe eliminar. El socialista apuesta por que "en el futuro habrá cabida para bicefalias y nuevos modelos de estructuras, que no necesariamente respondan a los liderazgos unipersonales".