Caso gürtel. La agencia tributaria asegura que sepúlveda no incurrió en delito fiscal pese a recibir más de 637.000 euros en metálico y regalos


El juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz ha recibido el informe de la Agencia Tributaria sobre el exalcalde de Pozuelo de Alarcón, Jesús Sepúlveda, en el que se estima que, pese a haber recibido más de 637.000 euros en dinero y en regalos entre los años 2000 y 2005, no ha incurrido en un delito fiscal, puesto que lo defraudado no llega a los 120.000 que establece la ley.
Ruz citó el pasado ocho de mayo a cuatro personas vinculadas al Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón (Madrid) sobre el presunto cobro por parte de Sepúlveda de comisiones. Además, pidió el pasado 29 de abril un informe a la Agencia Tributaria, que en sus conclusiones aprecia ahora delitos de prevariación y cohecho, pero no un delito fiscal. Al exalcalde también se le atribuye un delito de malversación de fondos públicos, sobre el que la Hacienda pública no se pronuncia.
En el citado informe, al que tuvo acceso Servimedia, asegura que el que fuera marido de la ministra de Sanidad, Ana Mato, cobró un total de 637.000 euros de la trama Gürtel, de los que 477.090 corresponden a dinero en metálico recibido en sobres entre los años 2000 y 2005.
El informe asegura que Sepúlveda recibió “entregas de dinero, viajes y otras prestaciones en su favor o en el de miembros de su familia”. Sin embargo, todos estos ingresos irregulares tienen la consideración de “ganancias patrimoniales” que deben ser declaradas a Hacienda.
En las fechas a las que se refiere el informe, Sepúlveda seguía casado con Mato, que tras saltar el escándalo a los medios de comunicación argumentó que la pareja estaba separada de hecho desde hace unos diez años.
Los cobros se distribuían en la entrega de sobres mensuales de 6.000 euros, cuyo cobro no supera el límite de 120.000 euros necesarios para que haya delito fiscal. Según las conclusiones de los inspectores de Hacienda, “no pueden tener consecuencias fiscales para Sepúlveda sin perjuicio de las que puedan existir a efectos de otros delitos, o para otras personas o entidades”.
De hecho, en los años con regalos de mayor cuantía, 2002 y 2003, las cuotas presuntamente defraudadas fueron 92.869 y 106.783 euros, muy por debajo del mínimo exigido para que exista delito fiscal.
Los 382 folios enviados por la Organización Nacional para la Investigación del Fraude (ONIF) detallan que Sepúlveda compró coches de alta gama por un importe total de 217.000 euros, de los que una parte la pagó de su bolsillo. Se trata de un BMW 523-i, un Jaguar, un Jeep Grand Cherokee y un Range Rover.
Además, gastó en viajes para él y su familia más de 50.000 euros, entre los que se encuentran los desplazamientos a Euro Disney, Dublín, donde viajaron su hijo Borja y su mujer, Ana Mato; Ginebra, Santiago de Compostela, Barcelona, o Murcia. Todos esos servicios turísticos fueron abonados por la central de Pasadena Viajes, que dependía directamente de Correa. Entre los regalos que cita el informe también hay uno de 610 euros para Ana Mato.
Otros 5.108 euros en fiestas familiares, que incluyen la compra de globos, payasos y distintos servicios de animación para fiestas de cumpleaños infantiles con motivo del cumpleaños de sus hijos o de su primera comunión.
Este informe de la Agencia Tributaria indica que tiene constancia de un presupuesto de un cumpleaños por valor de 7.274 euros, aunque bajo ese epígrafe también hay gastos electorales y resulta imposible deslindar qué cantidad se destinó al pago de la fiesta.
Considera probado, además, que la empresa Constructora Hispánica pagó comisiones a Correa y que “la contratación del Ayuntamiento de Pozuelo con sociedades de Correa se manipuló y ocultó parcialmente por medio de empresas interpuestas”.

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