Centro Carter cierra su oficina en Egipto y no supervisará próximos comicios

  • El Centro Carter ha decidido cerrar su oficina en Egipto y no desplegará una misión de observación durante las próximas elecciones parlamentarias, que considera que no servirán para que Egipto avance hacia una democracia real.

El Cairo, 16 oct.- El Centro Carter ha decidido cerrar su oficina en Egipto y no desplegará una misión de observación durante las próximas elecciones parlamentarias, que considera que no servirán para que Egipto avance hacia una democracia real.

Una portavoz de la organización explicó hoy a Efe hoy que ya no queda ningún empleado en la oficina del Centro Carter en Egipto, que cerró sus puertas después de tres años de trabajo.

Esta decisión se justifica en que en Egipto "el ambiente político está profundamente polarizado y el espacio político se ha reducido para los partidos, la sociedad civil y los medios de comunicación", según un comunicado.

Para el Centro Carter, las organizaciones internacionales y de la sociedad civil egipcia hacen frente cada vez a más restricciones que les impiden observar con credibilidad las elecciones.

"El actual ambiente en Egipto no es propicio para unas elecciones verdaderamente democráticas y para la participación ciudadana", denunció el expresidente estadounidense Jimmy Carter.

El fundador de la organización expresó su esperanza de que las autoridades egipcias reviertan medidas adoptadas recientemente que "limitan los derechos de asociación y de reunión, y restringen las operaciones de los grupos de la sociedad civil de Egipto".

Por ello, el Centro Carter recomienda al Gobierno egipcio que deje de reprimir a disidentes, periodistas y grupos políticos, asegure la libertad de asociación para los grupos de la sociedad civil y facilite el registro de organizaciones civiles internacionales.

Además, aconseja a las autoridades electorales que acrediten con tiempo a los observadores internacionales y les garanticen su acceso a todos los niveles del proceso y la publicación de comunicados públicos en ese periodo.

Desde el derrocamiento del presidente islamista Mohamed Mursi el 3 de julio de 2013 por el Ejército, las autoridades han perseguido a los Hermanos Musulmanes y detenido a numerosos activistas por distintos motivos.

También emitieron una ley que restringe el derecho de manifestación, al tiempo que fueron condenados a hasta diez años de cárcel varios periodistas del canal catarí Al Yazira, acusados de dar una imagen "falsa" de Egipto y colaborar con los Hermanos.

Ya en las pasadas elecciones presidenciales de mayo, en las que arrasó el exjefe del Ejército Abdelfatah al Sisi, el Centro Carter -que tuvo una misión de apenas diez expertos- alertó del contexto político "restrictivo" y el "estancamiento" de la transición política.

La organización no gubernamental ha enviado misiones de observación a la mayoría de los procesos electorales en Egipto tras la caída del régimen de Hosni Mubarak, en febrero de 2011.

Mostrar comentarios