Comunidad del África oriental pide más sanciones para Eritrea

  • La Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo (IGAD) de África Oriental pidió hoy a la Unión Africana y las Naciones Unidas la imposición de más sanciones sobre Eritrea, a quien acusan de llevar a cabo un "papel activo en la desestabilización de la región con su apoyo a elementos subversivos".

Addis Abeba, 4 jul.- La Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo (IGAD) de África Oriental pidió hoy a la Unión Africana y las Naciones Unidas la imposición de más sanciones sobre Eritrea, a quien acusan de llevar a cabo un "papel activo en la desestabilización de la región con su apoyo a elementos subversivos".

La petición de la IGAD se produjo en el marco de una reunión en Etiopía de los jefes de Estado de los siete países miembros de la organización para debatir la tensa situación de Sudán, Somalia y Eritrea.

Según el organismo del África oriental, las sanciones, de carácter económico, deberían tener como objetivo el sector minero y las fuentes financieras de la diáspora para acabar con el "papel activo (de Eritrea) en la desestabilización de la región a través del apoyo a extremistas y otros elementos subversivos".

El país, que cuenta con unos tres millones de habitantes, recibe enormes cantidades de dinero del extranjero del gran número de eritreos que viven en occidente y en Oriente Medio, debido en parte a las campañas que lleva a cabo el Gobierno de Eritrea para impulsar esta acción.

Por otra parte, el sector minero de Eritrea ha crecido notablemente en los últimos años debido a las importantes inversiones de empresas mineras occidentales, en especial las dedicadas a la extracción del oro.

IGAD y Etiopía, uno de sus miembros más destacados, han acusado a Eritrea en repetidas ocasiones de apoyar a rebeldes que buscan derrocar al gobierno somalí, así como de impulsar a pequeños grupos de insurgentes y opositores armados en Etiopía.

Según IGAD, Eritrea también se entromete en asuntos internos de Sudan y Yibuti.

En 2010, a raíz de una sanción del Consejo de Seguridad de la ONU, la IGAD inició un embargo armamentístico y la restricción de viajes y congelación de bienes de algunos de los cargos políticos más importantes de Eritrea.

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