Oviedo.- La sección tercera de la Audiencia Provincial de Oviedo ha condenado a penas que superan los 113 años de cárcel a 19 imputados de pertenecer a una banda acusada de haber introducido desde Brasil dos kilos de cocaína en septiembre de 2005 y de distribuir estupefacientes en el Principado.
La sentencia, hecha pública hoy por la Fiscalía Superior del Principado, establece penas que oscilan entre los dos y los 13 años de cárcel para los 19 imputados, de los que 13 habían llegado a un acuerdo de conformidad con el fiscal antidroga de Asturias, José Perals, antes del juicio, iniciado el pasado 24 de noviembre.
En sus conclusiones provisionales, el fiscal había pedido penas que oscilaban entre los dos y los quince años de prisión por distintos delitos contra la salud pública, introducción de droga en territorio nacional y falsedad, que en conjunto sumaban 153 años de cárcel.
No obstante, esta cifra se ha visto reducida dado el acuerdo alcanzado por Perals con trece de los acusados a los que ha rebajado las penas solicitadas en el escrito inicial.
Entre los que mostraron acuerdo de conformidad con el fiscal se encuentran los dos acusados para los que el fiscal pedía las mayores penas: José Luis C.A., que se enfrentaba a 13 años y 6 meses de prisión por tráfico de drogas, y a dos años por otro de falsedad; y su hermano, Félix C.A., para el que se reclamaban 13 años.
En el primer caso la pena se ha visto reducida a 11 años y 3 meses y en el segundo a 2 años.
José Luis C.A. fue detenido el 23 de septiembre de 2005 en un hotel de Miranda de Ebro (Burgos) con cerca de dos kilos de cocaína que había introducido en España desde Brasil y que, al parecer, quería distribuir en distintos puntos del norte del país.
En una cafetería cercana al hotel fueron detenidos también Juan Carlos Q.H., un industrial cárnico de Logroño, José Manuel R.G., que ha sido condenado a diez años de prisión; y Roberto Jesús A.B., condenado a trece años.
La detención de este grupo, que el fiscal considera que llevaba a cabo labores de distribución de cocaína, se llevó a cabo a raíz de las investigaciones iniciadas por la Policía a principios de 2005 ante las sospechas de que dos trabajadores del funicular de Bulnes se pudieran estar dedicando a la venta de estupefacientes.
Las investigaciones policiales llevaron a la detención de doce personas de la zona oriental y central de Asturias, entre ellas Carlos Francisco F.C., propietario de un pub de Gijón que, al parecer mantenía relación con el industrial de Logroño para la adquisición de cocaína, y al que la Audiencia le ha impuesto una condena de 5 años.
La investigación sobre Carlos Francisco F.C. llevó a la policía también a detener el 28 de abril de 2006 a éste y a otros dos hombres con los que se desplazó hasta Galicia para comprar 848 gramos de cocaína a Roberto Leiro S.R., que no se presentó a la vista oral y se encuentra en situación de rebeldía.
El total de la droga incautada en esta operación, que se ha mandado destruir, tenía un valor superior a los 280.000 euros.
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