Condenan dos responsables por el asesinato del periodista brasileño Decio Sá

Río de Janeiro, 5 feb.- Un juez de la ciudad brasileña de Sao Luis condenó hoy a dos de los once acusados por el asesinato en abril del año pasado del periodista Decio Sá, reportero del diario Estado de Maranhao, por sus investigaciones sobre una banda criminal, informaron fuentes judiciales.

Jhonathan Silva, que confesó haber hecho los disparos contra el periodista, y Marcos Bruno Silva, que conducía la motocicleta desde la que fue perpetrado el crimen, fueron condenados 25 y 18 años de prisión, respectivamente.

Las sentencias fueron leías por el juez penal Osmar Gomes dos Santos en la madrugada de este miércoles tras una audiencia que duró tres días en el foro de justicia de Sao Luis, la capital de Maranhao (nordeste de Brasil), y después de que el jurado considerara a los reos culpables de los delitos de homicidio calificado y asociación para delinquir.

Jonathan Silva, que ya estaba encarcelado, permanecerá recluido en el presidio federal de máxima seguridad de Campo Grande, a donde fue enviado por razones de seguridad, en tanto que su cómplice, que respondía al proceso en libertad y negó las acusaciones, fue trasladado al complejo penitenciario de Pedrinhas, en Sao Luis.

Decio Sá fue asesinado la noche del 23 de abril de 2013 cuando se encontraba con unos amigos en un bar de Sao Luis al que llegaron dos personas que le dispararon y le causaron la muerte.

El periodista, de 42 años, era reportero del área política del diario Estado de Maranhao y además mantenía un activo blog de denuncias.

Según los fiscales, Sá fue asesinado debido a sus publicaciones sobre el asesinato del empresario Fabio Brasil, entonces investigado por su vinculación a una organización criminal acusada de desvíos de recursos públicos en varios municipios del estado de Maranhao.

La fiscalía presentó pruebas de la vinculación de los dos acusados a la organización criminal, de la que formarían parte los otros nueve acusados que aún serán juzgados.

Entre los otros acusados figura Shirliano de Oliveira, prófugo y acusado de haber auxiliado en el crimen; José Raimundo Chaves, ya preso y acusado de haber intermediado entre los autores intelectuales y los pistoleros, y los policías Alcides Nunes da Silva y Joel Duran Medeiros, que supuestamente participaron en las reuniones en las que fue planificado el homicidio.

El asesinato fue condenado en su momento por asociaciones de prensa de Brasil y de todo el mundo, así como por la Alta Comisaria de Naciones Unidas para Derechos Humanos (ACNUDH), Navi Pillay.

La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), que también se unió a la ola de condenas, recordó que Sá fue el cuarto periodista asesinado en los primeros meses del año pasado en Brasil.