Santa Cruz de Tenerife, 9 mar.- La Guardia Civil ha desarticulado un grupo organizado de once personas que presuntamente robaban a turistas en lugares de tránsito como puertos y aeropuertos en distintas zonas de España y de otros países europeos, en una operación en la que se han recuperado joyas y dinero por valor de 300.000 euros.
Se les atribuye la comisión de delitos en Cataluña, Comunidad Valenciana, Andalucía, Baleares y, sobre todo, en la isla de Tenerife, así como en Italia, Alemania y Reino Unido.
La Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Tenerife inició sus investigaciones en enero del año pasado a raíz de la denuncia de una ciudadana alemana a la que robaron joyas y dinero por valor de 520.000 euros en el aeropuerto de Tenerife Sur.
La operación, denominada "Patagonia", dirigida desde el Juzgado de Instrucción número 2 de Granadilla de Abona, ha puesto al descubierto que la organización, formada por ciudadanos españoles y argentinos con historial delictivo, estaba estructurada y jerarquizada.
Estaban especializados en hurtos al descuido de carteras portadocumentos, bolsos de equipajes y efectos personales y actuaban preferentemente en zonas de llegada y salida de turistas en aeropuertos, puertos y hoteles, de acuerdo con la información facilitada por la Guardia Civil.
Utilizaban vehículos de alquiler que cambiaban a menudo y realizaban seguimientos de autobuses de traslado de grupos de turistas.
Tras seleccionar víctimas de avanzada edad, simulaban ser turistas y aprovechaban los descuidos para realizar los hurtos.
El dinero y los efectos sustraídos eran depositados provisionalmente en pisos que alquilaban por temporadas.
Después, los efectos se facturaban por vía aérea a Málaga y Granada, y a Italia y Argentina, donde se organizaban las ventas.
El dinero lo trasladaban en fajas adheridas al cuerpo hasta su destino final en Málaga, Granada y Argentina.
Con las tarjetas de crédito y débito hurtadas operaban con rapidez en cajeros antes de su cancelación y sacaban el máximo permitido.
Obtenían los números secretos en muchos casos del análisis de la documentación y del contenido de los archivos de los teléfonos móviles sustraídos.
El grupo se dividía en "células" de dos o tres personas que se intercambiaban y viajaban frecuentemente por zonas turísticas de España y Europa.
A través de Internet, detectaban dónde podía haber mayor afluencia de turistas en barcos y cruceros y se trasladaban a esos lugares.
Las detenciones se han producido en Tenerife, Málaga y Granada, con apoyo de las comandancias de esos lugares.
El presunto jefe del grupo, de nacionalidad argentina, fue detenido en el Aeropuerto de Málaga cuando se disponía a viajar a su país vía Italia con parte del botín de las joyas sustraídas a la ciudadana alemana en el aeropuerto de Tenerife Sur.
También llevaba dinero en efectivo adosado a la cintura en un fajín.
Entre los bienes recuperados están joyas, diez teléfonos móviles, tres relojes de oro, cámaras fotográficas, cámaras de vídeo, artículos de perfumería, 6.500 dólares en efectivo y 4.890 euros.
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