Detenidos once miembros de una banda que robaba en empresas mediante butrones

Alicante.- Once personas han sido detenidos por ser, presuntamente, miembros de un grupo organizado que ha robado en, al menos, cincuenta empresas de polígonos industriales de las provincias de Castellón, Valencia, Alicante, Murcia, Almería y Albacete, mediante el procedimiento del butrón.

Según la Guardia Civil, seis de los arrestados, procedentes de los países balcánicos y con numerosos antecedentes policiales, están acusados de cometer más de medio centenar de robos con fuerza cometidos en empresas.

Al parecer, otros tres de los detenidos prestaban labores de apoyo y cobertura a la organización, y dos más pertenecían a una trama de ventas de vehículos de procedencia ilícita.

Durante la intervención se han llevado a cabo nueve registros domiciliarios en la provincia alicantina (Torrevieja, Los Montesinos y Alicante).

Se han recuperado numerosos efectos como herramientas utilizadas en los robos, material electrónico, ordenadores y sistemas informáticos, diversas documentaciones falsificadas, armas de fogueo, dinero en metálico, inhibidores de frecuencia y radiotransmisores.

La denominada operación 'Tajo' comenzó el pasado octubre tras conocer la existencia de un grupo organizado y muy activo dedicado al robo de empresas de diversas provincias por el butrón.

Las investigaciones constataron que el grupo estaba asentado en varias urbanizaciones de las localidades de Torrevieja, Los Montesinos y Alicante, donde pasaban inadvertidos entre el vecindario.

Según la Guardia Civil, los seis primeros detenidos tomaban su actividad delictiva como si de un trabajo "normal" se tratara, incluso, teniendo estipulados dos días de descanso a la semana.

Uno de estos días lo dedicaban a recorrer durante las horas diurnas los diferentes polígonos industriales con el fin de seleccionar las víctimas de sus próximos golpes.

Efectuaban reconocimientos de los exteriores y se fijaban especialmente en las medidas de seguridad, vías de escape o grosor de las paredes.

Los días en que delinquían, se desplazaban a escondites ubicados en diferentes provincias, donde se ataviaban con ropas oscuras y recogían todo el material necesario para cometer los robos.

Tras cometer el golpe, regresaban a sus domicilios de madrugada, pasando antes por zulos donde depositaban el material utilizado para cometer los robos.

Las mujeres de la organización se encargaban de la logística, les daban cobertura mediante el alquiler de viviendas, adquisición de teléfonos móviles, envíos de dinero a sus países y contravigilancias en las entradas y salidas de los domicilios.

Las detenciones de los principales integrantes de la organización fueron realizadas cuando regresaban de efectuar robos.

La operación ha estado dirigida por el juzgado de instrucción número 2 de Torrevieja y ha sido llevada a cabo por el equipo contra el crimen organizado de la unidad central operativa de la Guardia Civil, con sede en Alicante.