El abogado Rosenberg ordenó su propia muerte para culpar al presidente de Guatemala

La Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), organismo vinculado a las Naciones Unidas, concluye que el abogado Rodrigo Rosenberg planificó su muerte y, por tanto, el mandatario guatemalteco, Álvaro Colom, queda exonerado de toda responsabilidad en este polémico hecho.

El titular de la CICIG, Carlos Castresana, ha dicho que de acuerdo a las pesquisas realizadas se pudo determinar que fue el propio Rosenberg "el que decidió ponerle fin a su vida" el 10 de mayo de 2009, pese a un vídeo póstumo en el que responsabilizaba de su muerte a Colom.

Las investigaciones contaron con la participación de 300 funcionarios que realizaron, entre otras labores, el análisis de unas 100.000 llamadas telefónicas mediante la interceptación de 14 números telefónicos, detalló Castresana al mostrar vídeos, fotos y documentos para sustentar sus conclusiones.

"El que dio la instrucciones (de su asesinato) fue el mismo Rosenberg", insistió el presidente de la CICIG, al asegurar que en este hecho participaron una decena de autores materiales y dos intermediarios.

También la CICIG confirmó la participación de dos autores intelectuales identificados como Francisco José y José Estuardo Valdés Paiz, ambos empresarios y primos de la primera esposa de Rosenberg, con quienes mantenía una relación muy cercana.

Al parecer, el abogado fallecido a los 47 años pidió a los dos empresarios que contrataran a un sicario para que se encargara de la ejecución de una persona cuyo nombre nunca les reveló, sin que ellos supieran que la víctima era el propio Rosenberg.

Las investigaciones apuntan a que Rosenberg ordenó comprar los teléfonos móviles, con los que mantuvo comunicación con los autores materiales del crimen, y recibió unos 40.000 dólares (27.600 euros) con los que pagaría a los sicarios, pero sólo les pagó 50.000 quetzales (4.130 euros).

Estas conclusiones exoneran de toda culpa a Colom a quien Rosenberg había acusado como responsable de su asesinato en un vídeo divulgado horas antes de su muerte. El abogado también responsabilizó a la primera dama, Sandra Torres; al secretario privado de la Presidencia, Gustavo Alejos y al empresario Gregorio Valdez, entre otros.

"Si usted está viendo este mensaje es que yo, Rodrigo Rosenberg Marzano, fui asesinado por el secretario privado de la Presidencia Gustavo Alejos y su socio Gregorio Valdez, con la aprobación del señor Álvaro Colom y de Sandra de Colom", dijo el abogado en su vídeo conocido poco después de su muerte.

Hasta el momento, las autoridades judiciales de Guatemala han detenido a 11 personas, pero sólo ocho están acusados formalmente, mientras que otras tres personas --entre ellas dos empresarios-- se encuentran prófugas, tras haber sido acusados de ser autores intelectuales.