El aeropuerto de Tel Aviv vuelve a la normalidad tras una huelga parcial

  • El aeropuerto de Tel Aviv, el único internacional de Israel, volvió este mediodía a la normalidad tras una huelga parcial de seis horas convocada por la organización sindical obrera israelí, la Histadrut.

Jerusalén, 8 feb.- El aeropuerto de Tel Aviv, el único internacional de Israel, volvió este mediodía a la normalidad tras una huelga parcial de seis horas convocada por la organización sindical obrera israelí, la Histadrut.

"Se han retomado todas las operaciones habituales incluidos los despegues y aterrizajes, aunque aún hay ciertos retrasos provocados por la huelga", dijo a Efe un funcionario del aeropuerto, que estuvo semiparalizado toda la mañana para exigir al gobierno que deje de contratar empleados a través de agencias de contratación externas y en condiciones muy inferiores a las de cualquier funcionario.

También estaba previsto que la Bolsa de Tel Aviv retomara su actividad normal pasado el mediodía.

La huelga, que en los demás lugares de trabajo seguirá toda la jornada, afecta a enfermeras de los hospitales públicos, personal universitario, empleados de puertos marítimos, banca, oficinas de inmigración, bancos, servicios ferroviarios y el Instituto Nacional de la Seguridad Social.

Los municipios y las guarderías públicas se han sumado también a la protesta, y sólo han quedado exentos esta vez de la convocatoria las escuelas, clínicas de la seguridad social y los distintos servicios de autobuses, que están atestados por el parón en los trenes.

Este mediodía volvían a reunirse, por tercera vez en menos de veinticuatro horas, el ministro de Finanzas, Yuval Steiniz, y el secretario general de la Histadrut, Ofer Eini, para intentar resolver la crisis en las negociaciones que se iniciaron hace seis meses.

La Histadrut exige al Gobierno israelí que ponga fin a lo que considera explotación de cientos de miles de funcionarios que la Administración pública tiene contratados a través de agencias de empleo desde hace años y que llegan a cobrar la mitad que un funcionario regular.

Eini llegó anoche a un acuerdo con la organización nacional de empresarios para resolver el problema en el sector privado, pero no canceló la huelga para presionar al primer ministro, Benjamín Netanyahu, a que se sume al acuerdo en nombre del sector público.

"Dada la oposición tajante al acuerdo que expresó el ministro de Finanzas, se requiere la orden del primer ministro para que éste sea aplicado a todo el mercado", explicó el líder sindicalista, que en en los últimos dos años parece tener mejor diálogo con la patronal que con las autoridades políticas y gubernamentales.

Fue con ellos con los que a finales de 2010 cerró también un acuerdo para elevar el salario mínimo en el mercado hasta los 4.300 shékels, unos 879 euros o 1.156 dólares, en dos fases entre 2011 y 2012.

El gobierno israelí, con el que había negociado antes infructuosamente, se acabó sumando a ese acuerdo por el impacto que tenía ante la opinión pública.

Medios de comunicación locales han calculado que cada día de huelga en el mercado cuesta a la economía israelí unos 1.000 millones de shékels, unos 269 millones de dólares o 204 millones de euros.

Mostrar comentarios