Jerez de la Frontera (Cádiz), 30 mar.- El Ayuntamiento de Jerez de la Frontera (Cádiz) llevará a cabo un Expediente de Regulación de Empleo que afectará a 300 trabajadores laborales de la plantilla municipal y a otros 90 de las empresas municipales.
Esta es la medida más drástica del plan de ajuste que ha aprobado hoy en solitario el PP en un pleno extraordinario del Ayuntamiento de Jerez en el que se han abordado las medidas para garantizar al Ministerio de Economía y Hacienda el pago de los 328 millones de euros prestados con los fondos ICO para afrontar la deuda municipal a proveedores.
Jerez, el segundo ayuntamiento español, después del de Madrid, y el primero andaluz en cuanto al número de facturas pendientes con sus proveedores, pretende con este plan ahorrar tres millones de euros en 2012, 94 en 2013 y, a partir de 2014 y hasta 2022, unos cien millones de euros anuales lineales.
La alcaldesa de Jerez de la Frontera, María José García-Pelayo (PP), ha explicado que esta medida, que ha sorprendido esta mañana a los trabajadores municipales y a la oposición -que se han ausentado del pleno como protesta- es "dura" pero necesaria porque la situación del consistorio es "dramática".
En rueda de prensa, García-Pelayo ha reconocido que este plan de ajuste exigido por Madrid para acceder a los préstamos del ICO "nos ha cambiado radicalmente el panorama en un mes" porque el equipo de gobierno no esperaba tener que afrontar "un ajuste de estas dimensiones".
Aún así la alcaldesa ha explicado que el ICO posibilitará que empresas proveedoras del ayuntamiento puedan mantener los puestos de trabajo. "Hay que defender todos los empleos", ha señalado la alcaldesa popular.
El ERE afectará "inicialmente" a 300 trabajadores del personal laboral indefinido del Ayuntamiento (unos 900 de una plantilla total de 1.920 trabajadores municipales) y a 90 de los 580 trabajadores de empresas municipales.
"Aquí ni hay señalada ninguna persona, ni ningún servicio ni nada", ha subrayado la alcaldesa, que ha incidido en que primero hay que clarificar la estructura administrativa del Ayuntamiento, sus servicios y aprobar la relación de puestos de trabajo, antes de decidir a quién afectará el ERE.
En el proceso ha descartado persecuciones y ha apuntado que las cargas familiares, la discapacidad, la mayor edad, la antigüedad o la falta de productividad serán criterios que "se irán cruzando para evitar el mayor daño posible a la plantilla".
Y ha explicado que Jerez, que gasta al día en nóminas 301.000 euros, casi lo mismo que al mes tiene que pagar a la empresa concesionaria de la limpieza de edificios públicos o al servicio de autobuses urbanos, ahorrará en total 32 millones de euros en el capítulo de personal, con el ERE y otras medidas.
Este es el segundo plan de ajuste que García-Pelayo encara desde su llegada al Ayuntamiento en las últimas elecciones municipales y que ya supuso, en el primero, la disminución del coste de la estructura política del Ayuntamiento de Jerez en un 40 por ciento con respecto a la anterior legislatura.
Los trabajadores municipales se han visto sorprendidos esta mañana por este anuncio.
"Ella siempre ha repetido que aquí no sobraba nadie, lo ha mantenido incluso hace una semana, y hoy, un día después de una huelga general contra la reforma laboral, presenta este plan sin haber informado ni negociado con nadie", ha dicho a EFE Nieves Calvillo, representante en el comité de empresa del sindicato CGT.
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