El banco de españa advierte de posibles desviaciones en los objetivos de déficit y pide reforzar las reglas presupuestarias

El Banco de España advierte de que las proyecciones fiscales para 2011 y 2012 "indican la existencia de algunos riesgos de desviación al alza" de los objetivos de reducción del déficit público.
En su Informe Anual de 2010, el supervisor explica que la reducción prevista del déficit se basa en unas previsiones macroeconómicas que, de no confirmarse, "podrían traducirse en una evolución menos favorable de los ingresos".
Además, subraya que "no se pueden descartar posibles desviaciones en el ámbito de las administraciones territoriales".
Para evitar las desviaciones, el organismo que gobierna Miguel Ángel Fernández Ordóñez asegura que se requiere el concurso de todas las administraciones y "un reforzamiento de las reglas de estabilidad presupuestaria".
En este sentido, aborda la posibilidad de establecer sanciones, algo que "podría plantearse de cara al futuro como un mecanismo adicional de disciplina", aunque reconoce que no es fácil definirla para que sea efectiva.
También se destaca la necesidad de aumentar la transparencia de las cuentas públicas, sobre todo en las administraciones territoriales, pues mientras en el Estado la información es "abundante" y "detallada", no ocurría lo mismo hasta hace poco en la mayoría de las administraciones territoriales.
Y ello "resultaba especialmente peligroso en un momento como el actual, en el que la falta de información puede redundar en una desconfianza de los mercados".
En todo caso, agrega que sería deseable una publicación regular de la ejecución presupuestaria del conjunto y de cada una de las comunidades autónomas, con la misma periodicidad, grado de detalle, desfase y facilidad de acceso que las del Estado.
También sería conveniente la disponibilidad de alguna información para las principales ciudades, dado su tamaño relativo en comparación con la mayoría de las comunidades.
De cara al futuro, indica, "sería deseable una mayor estabilidad del sistema de financiación y el empleo de algún método de cálculo objetivo de las necesidades reales de gasto de las comunidades".
De esta manera se podría evaluar el gasto efectivo actual, dotar al sistema de una mayor objetividad y eliminar los incentivos a replantear periódicamente acuerdos que tomen como base el nivel de financiación previamente alcanzado.
SANIDAD
Por otra parte, el regulador también alerta de que "la dinámica del gasto sanitario es preocupante", pero considera que "se pueden lograr ganancias de eficiencia en este sector".
La mejora de la eficiencia del gasto sanitario podría permitir ahorros de costes incidiendo en ciertos factores regulatorios.
Entre ellos, se encuentran los mecanismos de precios, la regulación de los precios de los proveedores, así como una cierta competencia en la provisión de los servicios, añaden.
REGLA DE GASTO
El informe del Banco de España aborda también los límites al gasto público como mecanismo de disciplina presupuestaria, y destaca que las experiencias en países como Dinamarca, Suecia, Finlandia o Suiza muestran que "los marcos fiscales más exitosos son aquellos que combinan una regla de déficit público con límites explícitos al gasto".
El supervisor ha proyectado la aplicación de una regla de gasto como la que propone la Comisión Europea para distintos países en el periodo 1998-2007.
En el caso de España, la aplicación de ésta habría facilitado el ahorro de los ingresos extraordinarios derivados de la expansión inmobiliaria y habría permitido un superávit superior en seis puntos porcentuales al realmente observado.
Pese a ello, desde el organismo dejan claro que "la definición de una regla de gasto no está, sin embargo, exenta de dificultades".
Por otra parte, desde el Banco de España apuntan que la consolidación fiscal "tiene que ir acompañada de un ambicioso programa de reformas estructurales", recuerdan las actuaciones en materia de pensiones y subrayan que "la reforma del mercado laboral sigue estando en el centro de las actuaciones necesarias de política económica".
Para el organismo, es "crucial" que la mayor parte del ajuste del déficit se anticipe en el tiempo y que se centre en el gasto público.