El CGPJ afronta la renovación del TC sin acuerdo para sus nombramientos

Madrid, 14 may.- El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que debería designar a dos nuevos magistrados del Tribunal Constitucional en su pleno del jueves, afronta por ahora este cometido sin acuerdo entre sus vocales, aunque el nombre del conservador Ricardo Enríquez parece reunir consenso suficiente.

El presidente del Tribunal Constitucional, Pascual Sala, y su vicepresidente, Ramón Rodríguez Arribas, nombrados por el CGPJ, han cumplido su mandato de nueve años en el cargo y deberían ser sustituidos por dos nuevos magistrados.

Los candidatos con más posibilidades en este momento son el citado Enríquez, magistrado de la Sala Tercera del Supremo y de tendencia conservadora; el también conservador y magistrado del Supremo José López y los progresistas Juan Antonio Xiol, presidente de la Sala Civil del Supremo, y Cándido Conde Pumpido, también magistrado del Supremo, penalista y ex Fiscal General del Estado.

La negociación para que dos de ellos, de tendencias diferentes, alcancen los trece votos -sobre los veinte vocales más el presidente que integran el pleno del órgano de gobierno de los jueces- está todavía en marcha.

Aunque Enríquez parece contar con apoyos suficientes, no será hasta el momento final, al completarse las dos vacantes, cuando se confirme su designación y, dado que hoy no se ha llegado a ningún acuerdo en la sede del CGPJ, será mañana, jornada festiva en Madrid, cuando, a través del teléfono, prosigan las negociaciones.

Si el órgano de gobierno de los jueces no quiere retrasar la renovación del Tribunal Constitucional debe cumplir los plazos y acordar sus propuestas en el pleno del jueves.

Fuentes del CGPJ han informado a Efe de estos extremos y han añadido que si no se alcanza el acuerdo antes de que comience el pleno, las votaciones se extenderán a la tarde, probablemente después de haber acordado un sistema de elección que pueda facilitar que surja una mayoría suficiente.

El CGPJ no está obligado por ley a seguir ninguna norma para regular estas votaciones y no está obligado tampoco a que los nombramientos surjan de un número limitado de éstas, es decir, puede hacer un número indefinido de votaciones, según las citadas fuentes.