El congreso rechaza subir el salario mínimo


El Congreso de los Diputados rechazó este martes con 173 votos en contra y 141 a favor una proposición de ley del PSOE para elevar el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) un 2,5% este año y garantizar su poder adquisitivo en el futuro.
En el debate en el Pleno del Congreso de los Diputados, el parlamentario popular Rafael Merino criticó la “hipocresía política” del PSOE por reclamar esta subida del salario mínimo y afirmó que “lo realmente dramático” fue que durante los años 2008 y 2011, cuando gobernaban los socialistas, “mandaron a 3,5 millones de españoles al desempleo”.
“Eso sí que es crear desigualdades”, dijo Merino, en respuesta a las críticas del conjunto de partidos de la oposición, que respaldaron esta medida, y que denunciaron que el Ejecutivo del PP haya congelado el salario mínimo durante dos años consecutivos.
“Desde los años 60 nunca se había congelado en dos ejercicios consecutivos el salario mínimo”, aseveró el ex ministro Jesús Caldera, que fue el encargado de defender la proposición del PSOE.
En este sentido, alertó sobre la “situación dramática” que viven los perceptores del salario mínimo, sobre todo aquellos para quienes éste es el único ingreso en el hogar y que “están al borde de la pobreza”.
Por esta razón, el PSOE proponía un incremento del SMI del 2,5% en este año, “eliminando la congelación aprobada por el Gobierno”, y que en el futuro se tome en consideración la evolución del salario medio a la hora de fijar la subida del SMI.
Asimismo, la proposición de ley establecía la garantía de que el salario mínimo mantendrá su poder adquisitivo en el futuro y que se darían los pasos necesarios para que su cuantía se acerque “gradualmente” al objetivo de que represente el 60% del sueldo medio.
Caldera instó a los diputados a apoyar esta medida “por razones sociales, éticas y económicas”, ya que, de lo contrario, “el futuro será peor y el malestar crecerá rápidamente” entre los ciudadanos.
OPOSICIÓN
Los portavoces de los partidos de la oposición que tomaron la palabra mostraron sin excepciones su apoyo a la proposición de ley, aunque en algunos casos plantearon algunas críticas al contenido de la medida.
Fue el caso del diputado de UPyD Álvaro Anchuelo, quien, pese a respaldar la medida, advirtió de que “sería un error” llevar a cabo una subida “fuerte” y abrupta del salario mínimo.
También matizó su apoyo el portavoz del PNV Emilio Olabarría, quien, aunque aseguró que comparte “la práctica totalidad” de la propuesta, criticó que el Gobierno anterior no incrementara en mayor cuantía el SMI.
Por su parte, Carles Campuzano de CiU sostuvo que hay “recorrido” para aumentar el salario mínimo y “situarlo en términos que sean razonables”. En este sentido, denunció que actualmente en España se da el caso de que hay trabajadores que son pobres, porque sus salarios no son suficientes para que salgan de esta situación.
La diputada de La Izquierda Plural Laia Ortiz afirmó que la mejora de este indicador es “una demanda de la sociedad” que “insiste en la necesidad de estos cambios”.
Dentro del Grupo Mixto, Uxue Barkos, de Geroa Bai, denunció que la “brecha es cada vez más alargada y hay que ponerle freno”, mientras que Olaia Fernández Davila, del BNG, subrayó que su formación “comparte total y absolutamente la iniciativa”.
Por último, Teresa Jordá de ERC recordó que el salario mínimo en España “no llega ni al 40%” de la remuneración media y “está bajando”.

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