El líder espiritual tibetano, de 80 años, bajó sin ninguna ayuda del avión que lo llevó al aeropuerto de Dharamsala y se reunió con un grupo de fieles que lo esperaban. "Estoy bien", dijo. "Hice un chequeo, el resultado es excelente".
En Estados Unidos, el líder tibetano en el exilio ingresó en la prestigiosa clínica Mayo de Rochester (Minnesota), según la CNN.
Tenía previsto visitar varias ciudades estadounidenses, incluida Filadelfia, donde le iban a entregar la medalla de la libertad por su contribución a la defensa de los derechos humanos.
A pesar de su edad, el dalái lama sigue viajando mucho. El anterior problema de salud del premio nobel de la Paz se remonta a 2002, cuando tuvo que ser hospitalizado en Bombay por una infección.
El líder espiritual se retiró oficialmente de la acción política en 2011, y delegó sus responsabilidades a un primer ministro elegido por los tibetanos en el exilio.
El dalái lama, que ya no pide la independencia de Tíbet, sino una mayor autonomía, sigue siendo uno de los enemigos de Pekín, que lo acusa "de actividades separatistas antichinas".
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