El jefe de la policía en el país vasco pide que se cambie al equipo investigador del “faisán”


El jefe superior de Policía del País Vasco, Enrique Pamies, solicitó hoy a la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional que ordene la sustitución del equipo investigador del “caso Faisán”, dirigido por el comisario de la Policía Nacional Carlos Germán, al entender que este grupo no es “objetivo” ya que sus miembros también son sospechosos de haber participado en el “chivatazo” a ETA.
La representación legal de Pamies realizó esta petición en la vista celebrada hoy por la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional para estudiar los recursos interpuestos contra varias de las decisiones adoptadas por el instructor del “caso Faisán”, el juez Pablo Ruz.
Los abogados José María Fuster Fabra y María Ponte, quienes ejercen la defensa de Pamies, reclamaron que se nombre un nuevo equipo investigador, bien de la Policía Nacional, bien de la Guardia Civil, para que se investiguen todos los flecos en torno al chivatazo a ETA, que tuvo lugar el 4 de mayo de 2006 y que alertó a la banda terrorista de la operación policial que se iba a llevar a cabo contra su aparato de extorsión.
El jefe superior de Policía del País Vasco critica en su recurso que se encargara esclarecer el “chivatazo” al equipo de Carlos Germán cuando este grupo era precisamente el que había montado el dispositivo policial en torno al bar Faisán de Irún (Guipúzcoa) en el momento en el que tuvo lugar la delación.
OPOSICIÓN DEL FISCAL
Sus letrados destacaron que el equipo de Carlos Germán “evidentemente no se puede investigar a si mismo” y afirmaron que en su investigación las vías alternativas a la tesis principal han sido “cercenadas”.
El fiscal Daniel Campos, quien sustituyó en la vista al fiscal Carlos Bautista, encargado habitual del “caso Faisán” dentro del Ministerio Público, se opuso en la vista a que se cambie al equipo investigador y pidió a los magistrados de la Sección Segunda de lo Penal que desestimen el recurso de Pamies, según informaron fuentes jurídicas.
Pamies está imputado en la causa junto al que fuera director general de la Policía Nacional Víctor García Hidalgo y al inspector José María Ballesteros. Los tres están acusados de delitos de colaboración con ETA y revelación de secretos, con lo que podrían ser condenados hasta a 13 años de cárcel cada uno.
HORA DE LA DELACIÓN
Los letrados pusieron también en duda que la delación tuviese lugar entre las 11.10 y las 11.40 horas del 4 de mayo de 2006, un lapso de tiempo fijado por el equipo de investigación en base a varios elementos, principalmente la declaración prestada por Joseba Elosua, dueño del bar Faisán de Irún (Guipúzcoa), presunto enlace del aparato de extorsión de ETA y la persona a la que se dio el “chivatazo”.
La defensa de Pamies señala que no es lógico que, tras recibir la delación, Elosua esperase cerca de una hora en el interior del bar antes de dirigirse a una cabina e intentar alertar al aparato de extorsión de ETA de la operación policial que se iba a desarrollar en su contra.
Los abogados solicitaron además en la vista que se investiguen las llamadas entrantes y salientes de la zona del bar Faisán de Irún, Guipúzcoa, donde tuvo lugar el soplo a ETA, que pasaron por repetidores franceses o que fueron realizadas vía satélite entre las 11.00 y las 12.41 horas del 4 de mayo de 2006.
Quieren de esta forma demostrar que la llamada de Ballesteros no es la única posible con la que se pueda explicar la delación a ETA.
Los abogados del jefe superior de Policía del País Vasco se volvieron a quejar que a lo largo de todo el proceso judicial no se ha admitido “ni una sola de las diligencias de instrucción” solicitadas por los imputados.

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