El juicio de Segi acaba el martes con la última palabra de los acusados

Madrid, 2 feb.- El juicio contra cuarenta supuestos miembros de Segi, la ilegalizada rama juvenil de Batasuna, finalizará el próximo martes en la Audiencia Nacional con la exposición de las conclusiones de cinco de sus defensas y el turno de última palabra de los acusados.

Según han informado fuentes jurídicas, la última sesión del juicio, que comenzó el pasado mes de octubre, comenzará a las 10.00 horas en la sede de la Audiencia de San Fernando de Henares (Madrid), después de que la semana pasada las acusaciones y la Fiscalía expusieran sus conclusiones.

El fiscal Luis Barroso ha mantenido todas las peticiones iniciales de pena para los encausados, en concreto 9 años de cárcel para nueve de ellos, que considera dirigentes de la organización juvenil y a los que imputa un delito de integración en organización terrorista con el grado de cabecillas, y 7 años de prisión para el resto.

Barroso afirmó en la exposición de sus conclusiones que todos los indicios contra ellos de que son parte de la organización se han visto corroborados.

Los nueve acusados que el fiscal considera dirigentes de Segi son Irati Mújika Larreta, Ainara Bakedano Cuaresma, Jon Anda Vélez de Mendizabal, Gaizka Likona Anakabe, Olatz Izaguirre Sarasti, Jon Tellería Barrena, Asier Coloma Ugartemendía, Ibai Esteibarlanda Echeverria y Carlos Renedo Lara.

Barroso indicaba en su escrito de acusación que la organización Segi "complementa la actividad de lucha armada de la banda terrorista ETA mediante actos de kale borroka o lucha callejera que, incidiendo en la seguridad ciudadana, persiguen producir profundo temor atacando al conjunto de la sociedad democrática y constitucional del Estado de Derecho, o de otro modo, atentando contra la paz pública".

También mantuvo su petición inicial de pena (entre 10 y 12 años de cárcel) la abogada de la acusación ejercida por la asociación Dignidad y Justicia, Vanessa de Santiago, quien destacó la falta de credibilidad de las denuncias de torturas de algunos de los acusados, que se han archivado.

En las primeras jornadas del juicio, los acusados aseguraron que se les procesa por una actividad exclusivamente política, que el juicio supone un "paso atrás" en el proceso de paz vasco y muchos denunciaron haber sufrido torturas tras su detención.

Vestidos con camisetas naranjas en las que se leía "Libre", "Free" y "Askatu" con el subtítulo en euskera "De la solidaridad al compromiso", coincidieron en calificar el juicio de "anacronismo" dado el "contexto político y social actual" y en pedir al Gobierno que dé pasos para ayudar en el proceso de paz.