El Pacto de Estado, un diálogo de sordos

  • Todos los partidos políticos se muestran a favor del pacto. Todos piden concreción al resto de fuerzas políticas para definir por dónde debe ir el acuerdo .Y todos se aferran a sus propuestas económicas para salir de la crisis. Pero ninguno parece dispuesto a dar a torcer su brazo. Sólo la mediación del Rey lo hace algo más factible.
Beatriz Toribio

¿Quién quiere un Pacto de Estado para salir de la crisis económica? A tenor de las palabras de los responsables de los principales partidos políticos, todos están a favor del acuerdo. Ayer mismo, la vicepresidenta primera , María Teresa Fernández de la Vega, insistía en que el Gobierno siempre se ha mostrado dispuesto al consenso y al diálogo. Una tesis que el Ejecutivo y el PSOE vienen repitiendo desde que, a principios de esta semana CiU tendiera de nuevo la mano al Gobierno para el acuerdo.

Y desde el PP, lo mismo. Su líder, Mariano Rajoy, volvía a repetir este viernes el mensaje que ha lanzado durante toda la semana: que él mismo ha ofrecido a Zapatero en repetidas ocasiones pactos de Estado para hacer frente a la crisis, pero sin encontrar respuesta.

A la vez, los dos piden a la otra parte concreción sobre su contenido. El jueves lo hacía el portavoz del PSOE en el Congreso, José Antonio Alonso, y ayer, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, aseguraba que “un pacto por un pacto no es bueno” y que sólo “si tiene contenido y medidas ambiciosas” tendrá éxito.

Y cuando se les pide concreción, ambas formaciones se ciñen a las medidas que han defendido hasta ahora. Alonso ya dejó claro al anunciar la ronda de contactos con otros grupos, que las propuestas del Gobierno para ese acuerdo son las que ha puesto en marcha y las que ya ha diseñado para sacar al país de la crisis: plan de austeridad, la reforma de las pensiones y del mercado laboral y la Ley de Economía Sostenible.

Esta postura es difícil de conciliar con la del PP, que pretende que este pacto cambie “radicalmente” la política económica de Zapatero, en palabras de Cospedal. Además, los populares reconocen que será complicado llegar a un entendimiento con el PSOE “si mantiene su tesis de subir los impuestos” y no está por la labor de llevar a cabo un plan de austeridad de las Administraciones Públicas “más ambicioso”. El Gobierno ha propuesto en este campo un recorte para este año de 5.000 millones y el PP quiere que se eleve a 10.000 millones. José Antonio Alonso ya dijo que en este tema no hay nada que discutir.

Y en medio del PSOE y el PP está CiU, quien ha adoptado la postura más democrática al ser el primero en apostar por un gran Pacto de Estado para salir de la crisis. Pero este miércoles, el propio Josep Antoni Durán i Lleida se mostraba escéptico ante la falta de “receptividad” que veía en los dos principales partidos.

Sólo la intervención del Rey ha dado más fuerza a la posibilidad de alcanzar un gran Pacto de Estado. Tras su llamamiento a favor de alcanzar “amplios acuerdos económicos”, se hizo público su encuentro de ayer con los líderes sindicales de UGT y CCOO, y horas después la Casa de Real hizo pública una nota en la que reconocía que se han intensificado los contactos a raíz de la crisis económica.

El PSOE y el PP recibieron con buenas palabras la intervención del Rey, pero con la boca pequeña. De la Vega recordó que es competencia del Gobierno "abordar acuerdos" y dejó claro que el Rey no ha iniciado ninguna ronda de contactos, sino que estos encuentros forman parte de las habituales reuniones que Don Juan Carlos mantiene “sobre los temas que afectan al Estado”.

Y en el PP, si bien se reconocía que la mediación del Rey es“un incentivo” para poder alcanzar el acuerdo, es José Luis Rodríguez Zapatero “quien tiene que incentivar esa voluntad de acuerdo”.

Es decir, buenas palabras pero por ahora las espadas siguen en alto y hay poca voluntad por los dos grandes partidos de sentarse y empezar a diseñar un Pacto de Estado para salir de la crisis.

Mostrar comentarios