El pp pide a zapatero “que haga algo, genial o ridículo, pero algo” para superar la crisis de la deuda


El vicesecretario de Comunicación del Partido Popular, Esteban González Pons, reclamó este jueves al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, “que haga algo, genial o ridículo, pero algo” para superar la crisis de la deuda que está encareciendo los intereses que paga España para financiarse.
González Pons aseguró en rueda de prensa que la pregunta no es si el PP quiere un adelanto electoral sobre el ya decidido, sino si España puede aguantar hasta noviembre en las actuales circunstancias, porque lo de las últimas horas “ha sido para habernos matado” y puede haber más episodios similares.
Por ello, añadió, el presidente “tiene que reflexionar con sentido de Estado y amor a su país” y darse cuenta de que España no puede estar tres meses “sometida, con un Gobierno en funciones, a los bandazos de los especuladores”.
Explicó que eso no es necesariamente adelantar aún más las elecciones, pero sí “hacer algo”, que pueden ser reformas realmente capaces de atajar el problema de fondo de la crisis de la deuda, y no sólo el síntoma, es decir, fortalecer la economía para que deje de ser el flanco más débil del euro.
A su juicio, tiene que hacer “algo, que sea genial o ridículo, pero algo”, que indique con claridad “que hay vida en La Moncloa” y que se está reaccionando a lo que ocurre.
Mientras, España paga más intereses por su deuda y todos esos recursos no estarán disponibles para crear empleo, por lo que la tardanza en reaccionar implica “más paro” y que “peores serán las consecuencias” de la inacción del Gobierno.
Aunque el PP defendía que la mera fecha de las elecciones aportaría certidumbre, González Pons argumentó que hay una “circunstancia extraordinaria” provocada sin duda por “las malas políticas” de Rodríguez Zapatero, que requiere más intensidad de reacción.
En su opinión, la mera posibilidad de que esas elecciones puedan saldarse con “continuidad” de las políticas desarrolladas hasta ahora “transmite incertidumbre”, aunque resulte evidente que “ningún español sensato” optará por que sigan gestionando los socialistas.

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