Belgrado, 6 ene.- El presidente de Serbia, Boris Tadic, se desplazó hoy a Kosovo entre protestas de ultranacionalistas albanokosovares, para pasar la Navidad ortodoxa en el monasterio de Decani, uno de los santuarios más venerados por los serbios.
La policía kosovar tuvo que usar gas pimienta para dispersar a los manifestantes, que intentaron bloquear la carretera hacia el monasterio por la que debía pasar la caravana de vehículos oficiales de Tadic, informó la agencia serbia Tanjug.
Los manifestantes replicaron lanzando piedras a los policías antidisturbios.
Varios cientos de seguidores del opositor y ultranacionalista partido albanokosovar Autodeterminación protestaron durante el día con bloqueos del centro de Decani y de carreteras de acceso a esa localidad del oeste kosovar en protesta por la visita de Tadic y para impedir la llegada de los creyentes serbios al monasterio.
Las protestas tuvieron lugar también en la cercana ciudad de Pec, a unos 14 kilómetros de Decani.
La policía kosovar detuvo a ocho personas cerca de Podujevo, que fueron puestas en libertad tras ser interrogadas, mientras unidades de la fuerza de la OTAN en Kosovo, KFOR, y la policía de la misión europea EULEX reforzaron las medidas de seguridad en Decani.
Tadic asistirá en Decani a una liturgia con motivo de la Navidad ortodoxa, que se celebra el 7 de enero, según el antiguo calendario juliano, y a la iluminación del tradicional pesebre de ramas secas de roble y paja.
El monasterio de Decani data de la primera mitad del siglo XIV y es una joya de la arquitectura romano-bizantina declarada patrimonio mundial por la UNESCO.
Los albanokosovares, que son mayoría en la exprovincia serbia, declararon en febrero de 2008 su independencia, rechazada por Serbia y por la minoría serbia que vive en el norte de Kosovo colindante con Serbia y en varios enclaves aislados del centro y sur de Kosovo.
Desde el pasado verano persisten las tensiones en el norte de Kosovo, poblado por serbios, que rechazan la presencia de funcionarios de instituciones albanokosovares en los puestos fronterizos con Serbia.
Hoy, en una entrevista al diario serbio "Novosti", Tadic dijo que Belgrado desea solucionar el conflicto entre serbios y kosovares con un histórico compromiso, y anunció que pedirá el apoyo internacional para su plan.
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