El psoe acusa a morenés de "ningunear al parlamento" tras 48 peticiones de comparecencia sin atender

El portavoz socialista de Defensa, Diego López Garrido, acusó hoy al ministro de Defensa, Pedro Morenés, de “ningunear al Parlamento” porque acumula en menos de dos años de legislatura, un total de 48 solicitudes de comparecencia no atendidas en la Comisión del Congreso de los Diputados.
Para López Garrido, el voto en contra del PP hoy en la Comisión de Defensa a cinco peticiones de comparecencia “es la gota que colma el vaso”. Tres de ellas habían sido solicitadas por el Grupo Sociaista, para que informara sobre el caso de acoso sexual a la capitana Zaida Cantera de Castro, el de la soldado Silvia Ruiz expulsada del Ejército por fingir una lesión cuando padecía un cáncer y sobre la situación de la mujer en las Fuerzas Armadas.
El PSOE también había solicitado que Morenés, quien hoy mismo compareció en la Comisión del Senado para hablar de la reunión de ministros de Defensa de la OTAN de los pasados días 22 y 23, recibiendo por ello el agradecimiento de los senadores socialistas, informara sobre la situación de los traductores de las tropas españolas en la misión de Afganistán.
Igualmente, el PSOE del Congreso había pedido que el ministro explicara las posiciones contrarias a la Constitución defendidas por el teniente coronel Miguel Ayuso quien, “lejos de ser sancionado, fue promovido para el ascenso, de forma incomprensible. Lo que contrasta con las durísimas sanciones que han sufrido las asociaciones profesionales por reclamar sus derechos”.
López Garrido criticó que Morenés “sólo ha venido al Congreso, obligado por ley, para misiones internacionales, pero no lo ha hecho nunca para hablar de la Defensa Nacional, de las Fuerzas Armadas o de las personas, medios e infraestructuras de Defensa”.
El portavoz socialista puso las ausencias de Morenés en relación con las del resto de ministros, que suman 581 comparecencias sin atender, de las que 230 han sido solicitadas por el PSOE.
Para López Garrido, la ausencia del ministro de Defensa es “especialmente grave al tratarse de una política de Estado” y “romper el consenso que se estableció entre Gobierno y Parlamento durante las legislaturas socialistas”.
En su opinión, este comportamiento político es “muy preocupante”. Según denunció, “su nulo interés por la cultura de la defensa, por el diálogo y el acuerdo y por los intereses nacionales, unido a la conducta de un Gobierno que se rige por decretos leyes, es como si no estuviera en un sistema parlamentario. Este Gobierno no responde ante la sede de la soberanía nacional”.