El retorno

  • Muchos, dentro y fuera del PSOE, le daban por amortizado, pero parece que por las caras de entusiasmo y los aplausos que le han dedicado sus correligionarios, Alfredo Pérez Rubalcaba "ha vuelto". Y además reivindicando su papel en la recuperación del proyecto socialista.

Enrique Rodríguez de la Rubia

Madrid, 10 nov.- Muchos, dentro y fuera del PSOE, le daban por amortizado, pero parece que por las caras de entusiasmo y los aplausos que le han dedicado sus correligionarios, Alfredo Pérez Rubalcaba "ha vuelto". Y además reivindicando su papel en la recuperación del proyecto socialista.

Durante los tres días que ha durado la Conferencia Política de este fin de semana apenas se había dejado ver. Había preferido ceder gran parte del protagonismo a otros dirigentes, en especial a la presidenta andaluza, Susana Díaz, a la que algunos llaman ya la nueva "baronesa" del partido y esperanza de la renovación pendiente en el PSOE.

Y es que a pesar de llevar a cuestas un "catarrazo" de caballo, que según dice él mismo le ha pegado Elena Valenciano, los asistentes al cónclave socialista han podido ver al "mejor" Rubalcaba, incisivo pero relajado, con mordiente en la tribuna, seguro de su oratoria.

En su discurso de clausura, el líder del PSOE ha levantado los ánimos de los socialistas que, como ha reconocido Patxi López, ya han pasado lo peor de la "travesía del desierto".

Tras escuchar a Rubalcaba, los socialistas aseguran haber cogido oxígeno para iniciar el camino de la recuperación de la credibilidad y la confianza.

"Nos ha entusiasmado", proclamaba en los pasillos un dirigente socialista, que añadía que por el tono de su intervención, Rubalcaba "tiene cuerda" para rato.

"Para nada ha sido el discurso de una persona que pretende dar un paso atrás", añadía otro, sorprendido por la fuerza y la contundencia del discurso del líder socialista.

Un Rubalcaba que ha hablado de futuro, de salir a la calle a defender "con uñas y dientes" las conquistas sociales frente a una "derecha" que se está "cargando" la sanidad y la educación públicas.

Un Rubalcaba que ha hablado de las primarias abiertas, que supondrán "un antes y un después" en la política española y un "enorme ejercicio de generosidad" del PSOE con sus futuros votantes.

Un Rubalcaba que ha dado su aval a las primarias abiertas, pero que no ha adelantado ni cuándo, ni con qué candidatos, entre otras cosas porque no era el objetivo de esta conferencia.

Porque Rubalcaba ha hablado de ideas, de proyecto y de ganar el futuro de España, pero no ha dicho ni una sola palabra sobre su propio futuro, sus expectativas o sus deseos.

Frente a la recuperación de la figura de Rubalcaba, casi todos los aspirantes que más han ido sonando en las quinielas se han mantenido este fin de semana en un segundo plano.

Sobre todo Carme Chacón, especialmente comedida en sus declaraciones y a ratos oscurecida por el protagonismo que le ha dado el partido a Susana Díaz.

Otro de los "candidatables", Patxi López, ha reconocido que la reunión ha servido para reforzar al PSOE y a Rubalcaba y se ha mostrado convencido, como su jefe de filas, de que "el PSOE ha vuelto".

Una idea que comparte con su compañero del PSE Eduardo Madina, que también cree que el partido se ha visto reforzado y que todo el mundo sale mejor de como entró.

Rubalcaba, como su partido, "ha vuelto". Se verá si es para quedarse.

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