Empate a izquierda y derecha: el Congreso es de nuevo ingobernable

El sondeo del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), reedita prácticamente los mismos resultados de las urnas del pasado 20 de diciembre.

La única novedad es el sorpasso de Podemos al PSOE, por algo más de un punto. De celebrarse ahora elecciones, el partido de Iglesias-junto con sus confluencias-lograría un 21'9% en estimación de voto, frente al 20'5% de los socialistas. El PP calcaría el resultado, pasando de un 28,72% a un 28,8% y Ciudadanos volvería a quedar cuarto, con seis décimas menos que los que ahora tiene, un 13,93% frente al 13,3%.

De esta forma, el arco parlamentario quedaría prácticamente igual, y haría de nuevo necesarios los complicados pactos. La suma de PP y Ciudadanos, por ejemplo, lograría el 42'1% del voto estimado, frente al 42'4% del bloque PSOE-Podemos (un 46'1% si se suma IU), la gran coalición-PP, PSOE y Ciudadanos- llegaría al 62'6% del voto y otra hipotética alianza entre PSOE y Ciudadanos, un 33'8%.

Sin una suma claramente destacada, la maquinaria negociadora tendría que ponerse de nuevo en marcha. La novedad es que, si la ley electoral traduce la mayor estimación de voto en más escaños, los de Iglesias podrían llevar en este caso el mando de la formación de gobierno frente al PSOE.

El partido de Iglesias se consolidaría de esta forma como segunda fuerza política, desplazando a los socialistas como alternativa al partido de Rajoy.

Hay que tener en cuenta, no obstante, que las encuestas fueron realizadas entre el 2 y el 11 de enero, con lo que no recogen el impacto de los últimos escándalos de corrupción que han sacudido al PP: el caso Acuamed y la financiación ilegal de los populares valencianos.

Por entonces, los partidos analizaban aún qué pasos dar ante unos resultados inéditos, con un bloqueo político en ciernes. Los populares defendían que, en tanto partido más votado, tenían la iniciativa de tratar de formar gobierno, el secretario general socialista, Pedro Sánchez, tenía reciente la advertencia de sus barones en el Comité Federal para no dialogar con aquellos que defendiesen el independentismo, y Podemos no había trasladado aún ninguna oferta de gobierno aunque trataba de convencer a los socialistas de un acuerdo "de progreso".

De hecho, el 3 de enero, en su intervención ante el Consejo Ciudadano estatal de Podemos para analizar los resultados, Iglesias instó a los "sectores sensatos" del socialismo a acercarse a su partido para buscar un gobierno alternativo al PP y romper con Susana Díaz.