Dos empresarios se suman a las confesiones que apuntan financianción ilegal de CDC

  • Dos empresarios confiesan que facturaron al Palau de la Música trabajos que en realidad realizaban para CDC.

    Millet, Montull y su hija ya han reconocido esta semana donaciones del 2,5% para CDC a cambio de adjudicaciones de obra pública.

Mas afirma que las acusaciones de Millet y Montull son "pura invención"
Mas afirma que las acusaciones de Millet y Montull son "pura invención"
EUROPA PRESS

Continúa el cerco a Convergència. A las confesiones de Millet y Montull (padre e hija) de esta semana hay que sumar ahora las de dos empresarios que han reconocido ante el tribunal que facturaron al Palau de la Música trabajos que en realidad fueron realizados para el partido de Jordi Pujol y Artur Mas. De este modo ya son cinco las personas que han admitido una supuesta financiación ilegal de CDC.

El exconsejero delegado de la empresa de publicidad Altraforma, Miguel Giménez Salinas, ha sido el primero en explicar en el juicio que CDC les llamó para que facturaran al Palau de la Música por trabajos que su firma en realidad había hecho para el partido.

"Nos llamaron de Convergència y nos dijeron: factura aquí este concepto", ha explicado Giménez. El empresario ha reconocido que aceptaron falsear estas facturas -de los años 2006 y 2007- porque querían cobrar. En total, Altraforma facturó al Palau un total de 190.778 euros.

Por su parte, Juan Manuel Parra, gerente de la Hispart dedicada a montajes audiovisuales con el nombre comercial de Stereorent, ha reconocido en el juicio que presentó 13 facturas al Palau de la Música entre 2004 y 2008 por valor de 825.000 euros para cobrar los trabajos realizados en la campaña electoral de Convergència.

En este caso Parra sí ha explicado que fue el extesorero de CDC, Carles Torrent, quien le dijo que había acordado este sistema ilegal con Millet y Montull. "Nadie de CDC se preocupó por hacer un seguimiento de estos pagos", ha asegurado añadiendo que en un momento dado Osàcar, posterior tesorero del partido, le dijo que siguiera hablando con Montull pese a que los trabajos eran para CDC.Dos jefes de Ferrovial apuntan a contactos con Millet

Este viernes también han declarado en el juicio del Palau dos directivos de Ferrovial, la constructura que citaron Millet y Montull esta semana. Pedro Buenaventura, que fue director territorial en Cataluña y más tarde director general de la división de construcción de la compañía, ha negado que su constructora participara en el pago de comisiones a CDC a cambio de obra pública.En su declaración en el juicio por el caso Palau, Buenaventura ha afirmado que durante sus años en ejercicio en la constructora "nunca conoció" a los tesoreros de CDC, ni Daniel Osácar ni Carles Torrents.Desmiente así las confesiones de Fèlix Millet y Jordi Montull, que desvelaron el pago de un 4% de comisión a cambio de adjudicaciones de obra pública a Ferrovial. Para el partido iba el 2,5% y para ambos iban el 1 y el 0,5% respectivamente. Montull declaró que se elevó la comisión de 3 al 4% porque CDC quería más dinero.Sin embargo, en otro momento de la declaración Buenaventura sí ha admitido que un jefe de zona de Ferrovial le comentó que tenía "contactos" con Millet para conseguir la adjudicación de obras.Buenaventura ha reconocido, eso sí, que la compañía hacía donaciones millonarias al Palau por el "prestigio" que les generaba. En total aportaron 11 millones de euros a la institución.Juan Elizaga es el otro exdirectivo de Ferrovial que ha declarado este viernes y también ha admitido que las donaciones al Palau se hacían por ese "prestigio". El exresponsable de la constructora también ha negado conocer a los extesoreros de CDC y sí ha admitido que se reunía con Jordi Montull a solas.El segundo representante de la constructora ha negado que existiera trato de favor en la adjudicación de obras por parte de la Generalitat. Ferrovial ya emitió un comunicado en el que aseguraba que la compañía se regía bajo criterios de "tolerancia cero" con la corrupción.La Fiscalía sitúa al exconseller de Justicia Gordó como "conseguidor"La Fiscalía Anticorrupción considera acreditado que el exconseller de Justicia y exsecretario del Gobierno de Cataluña, Germà Gordó, era "el conseguidor o el recaudador" de presuntas comisiones ilegales pagadas por constructoras a CDC a cambio de concesiones de obras públicas.En un escrito, la Fiscalía sostiene que "no existe explicación legal y coherente que justifique la cantidad de gestiones, comidas, interlocuciones y reuniones" que Gordó ha mantenido con empresarios, algunas de ellas en la sede de la antigua CDC e incluso en el Palau de la Generalitat."Germà Gordó ha ido más allá del tráfico de influencias y ha actuado decisivamente para la adjudicación de contratos con la Administración pública", concluye la Fiscalía, que señala al ahora diputado de JxSí en el Parlament como actor principal en las contrataciones.En base a informes de la Guardia Civil, la Fiscalía enumera cinco casos en que Gordó habría actuado "decisivamente": obras del Consorcio de Educación, trabajos en un dique en el Puerto de Barcelona, la mejora de la carretera C-55, la plaza de les Glòries de la capital catalana y en un instituto en Manresa (Barcelona).Todo ello figura en un escrito con el que la Fiscalía pidió al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) la necesidad de abrirle una investigación, aunque por el momento este tribunal lo ha rechazado por falta de concreción en las pruebas, han informado fuentes judiciales.Artur Mas denuncia persecución de las cloacas del EstadoArtur Mas, por su parte, ha denunciado una persecución contra él empleando todo tipo de maniobras. El expresidente de la Generalitat ha afirmado que el Gobierno ha utilizado "fondos reservados" para acabar con el independentismo en Cataluña. Lo ha dicho en una entrevista concedida a Rac1, comparando su caso con otras acciones de las cloacas del Estado. Hay que recordar que el propio Mas se comparó con Gandhi, con Mandela, con Martin Luther King o con los premios Nobel de la Paz.Cuestionado por la llamada 'Operación Cataluña' y sobre las informaciones que vinculan al presidente Carles Puigdemont con los presuntos intentos del directivo de la empresa Oproler, Josep Manel Bassols, para conseguir ilícitamente obra pública en Girona, Mas ha afirmado "habrá que verlo".La 'Operación Cataluña', ha dicho "era una operación de difamación y calumnias con voluntad de alterar las elecciones en Cataluña diseñada por el Gobierno español, conocida por la Moncloa y hecha de manera ilegal", diseñada por el Ministerio del Interior a partir de montajes en los que se utilizaban "fondos reservados" para pagar a confidentes que decían mentiras.Mas ha afirmado que ninguna de las acusaciones se han demostrado, como la de la cuenta en Suiza del exalcalde de Barcelona, Xavier Trias. "Alteraron el resultado electoral, que es un delito que la policía española no ha investigado", ha criticadoComisiones del 4% Sobre el juicio del caso Palau, en el que el expresidente Fèlix Millet y su mano derecha Jordi Montull han desvelado el pago de comisiones del 4% a cambio de obra pública, Artur Mas ha negado que CDC adjudicara obras de forma irregular a cambio de supuestas comisiones. Ha añadido que las afirmaciones de Millet y Montull son para "colgarle el muerto" al partido para rebajar sus penas.El expresidente de la Generalitat también ha asegurado que si la Fiscalía sospechara realmente que estas comisiones existían, es "inconcebible" que no se estén investigando las adjudicaciones que hizo CDC. Si no se investigado, ha añadido, es porque saben que están bien hechas y no hubo trato a favor.Mas ha enfatizado que él se dedicaba a las cuestiones políticas pero no a controlar las finanzas del partido y ha dicho que desconocía los convenios que tenía CDC con el Palau de la Música, porque además procedían de los años 90, cuando él no tenía responsabilidades en la formación: "En su momento no supe de estos convenios ni nada de las finanzas del partido. Había personas que se dedicaban a ello", informa Europa Press.Mas ha reconocido que tomó conciencia cuando se destapó el caso Palau en julio de 2009, ha recordado que esas donaciones están reconocidas desde entonces y ha afirmado que "eran legales pero rozaban la línea de la moralidad", por lo que se devolvieron.Mas ha admitido también que CDC estaba bajo sospecha y se decidió crear un nuevo partido para deshacerse de ella: "¿Quiere más autocrítica que cerrar un partido político?", ha preguntado, tras lo que ha dicho que la nueva formación, el PDeCAT debe quedar libre de toda duda.Preguntado por si pone la mano en el fuego por el exconseller de Justicia Germà Gordó, después de que se la Guardia Civil le haya relacionado con licitaciones irregulares, ha dicho que sí, y que confía en él tanto como lo hace en el extesorero de CDC Daniel Osàcar. "Mi responsabilidad no era llevar la administración, las finanzas o los servicios jurídicos del partido, pero sí lo era poner al frente de estas áreas a personas que hicieran el trabajo correctamente", ha subrayado.

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