Bruselas, 27 feb.- España condicionó hoy su apoyo a la ejecución de un estudio de la Unión Europea sobre un posible acercamiento con Kosovo a que en él no se incluya ninguna referencia que pueda interpretarse como un reconocimiento de la independencia de la antigua provincia serbia.
"Somos incompatibles con cualquier declaración, conclusión o afirmación que suponga la consagración y el reconocimiento de la declaración unilateral de independencia", aseguró el ministro español de Exteriores, José Manuel García-Margallo, en una rueda de prensa tras reunirse con sus homólogos de los Veintisiete.
Los ministros de Exteriores comunitarios mantuvieron una discusión sobre Serbia y Kosovo, en la que de forma mayoritaria se mostraron a favor de que esta semana se conceda al Estado serbio el estatus de país candidato a la adhesión a la UE.
En paralelo, se trató también la posibilidad de efectuar un estudio sobre la viabilidad de sellar un acuerdo de asociación con Pristina.
"La condición que hemos puesto junto con algunos otros países es que cualquier estudio de viabilidad sobre la proyección europea no implique ni explícita ni implícitamente una sanción de una declaración unilateral de independencia, que entendemos contraria al derecho internacional", señaló García-Margallo.
Según explicó, el cambio de Gobierno en España no ha hecho variar la postura de Madrid sobre la independencia kosovar, a la que se opone por razones jurídicas y políticas.
Entre ellas, sin embargo, no hay ninguna de carácter interno, aseguró.
España es uno de los cinco países de la Unión Europea que no ha reconocido la independencia de Kosovo, algo que sí han hecho el resto de socios comunitarios.
Los gobiernos de Pristina y Belgrado, bajo los auspicios de la UE, lograron la pasada semana un acuerdo para permitir la participación de Kosovo en los foros regionales.
Ese pacto era una de las condiciones establecidas por los Veintisiete para dar luz verde a la concesión del estatus de candidato a Serbia.
En el caso de Kosovo, es la Comisión Europea la que propone llevar a cabo un estudio de viabilidad sobre la firma de un acuerdo de asociación, un paso previo para poder discutir posteriormente una adhesión.
"Es una primera parte, mirar el potencial de tener un acuerdo de asociación no quiere decir que vaya a ocurrir o no vaya a ocurrir", explicó hoy la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton.
El asunto será tratado de nuevo mañana en el Consejo de Asuntos Generales de la Unión Europea.
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