España mantiene su firme rechazo a la secesión de Kosovo después de tres años

Madrid.- El Gobierno español se mantiene firme en su posición de rechazo a reconocer a Kosovo como estado independiente de Serbia cuando se cumplen hoy tres años desde que las autoridades de Pristina decidieron proclamar la secesión de forma unilateral.

España es uno de los cinco países de la UE, con Grecia, Rumanía, Chipre y Eslovaquia, que no ha reconocido la independencia de Kosovo, a la que sigue considerando una provincia serbia, al igual que Rusia, India, China y la mayoría de países de América Latina.

Sí han dado su apoyo al nuevo estado un total de 75 países, con Estados Unidos a la cabeza, además de Alemania, Francia y Reino Unido.

El Gobierno español insiste en aducir que la decisión de Kosovo contravino el ordenamiento internacional y el derecho a la integridad territorial de Serbia, pese a que la Corte de Justicia de la ONU dictaminó, de forma no vinculante, que aquel paso unilateral no violó el marco legal.

"Nos parece que la independencia de Kosovo no tiene justificación política ni apoyo legal suficientes, ni coherencia en cuanto a lo que es el desarrollo de la política regional de Europa con respecto a los Balcanes", argumentó el secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido, en una comparecencia en el Congreso el pasado día 2.

El Ejecutivo ha negado que su postura se justifique por temor a que el reconocimiento de Kosovo aliente las aspiraciones nacionalistas en Cataluña y País Vasco.

"No responde a una cuestión táctica, sino a una convicción profunda", defendió en mayo de 2009 el ex ministro de Asuntos Exteriores Miguel Angel Moratinos, cuya 'fidelidad' a Belgrado ha heredado su sucesora en el cargo, Trinidad Jiménez.

El PP ha respaldado al Ejecutivo desde el primer momento, mientras CiU, PNV y ERC han reiterado que España está abocada a aceptar la secesión de la provincia de mayoría albanesa para no desmarcarse del conjunto de socios de la UE.

A pesar de su posición inflexible, el Gobierno español ha mantenido una posición constructiva en favor del desarrollo de la población kosovar y del diálogo entre las autoridades de Pristina y Belgrado para que puedan llegar a un entendimiento.