Eta. Rubalcaba insiste en que durante la tregua “las cosas se hicieron bien”

El vicepresidente primero y portavoz del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, insisitió en que durante la última tregua de ETA “las cosas se hicieron bien” desde el Estado y precisamente por eso ahora está convencido de que el terrorismo vive “el principio del fin”.
En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, Pérez Rubalcaba esgrimió la preservación de ese objetivo para asegurar que no quiere polemizar con el PP, a pesar de las duras acusaciones lanzadas contra él en los últimos días por el contenido de las supuestas actas de ETA durante la negociación.
El ministro echó mano de la ironía para preguntarse con una sonrisa “qué haría el PP conmigo” si no estuvieran en el pacto antiterrorista, que ambos dicen respetar y defender. “¡Menos mal!”, exclamó.
Acto seguido, defendió la tesis de que la política antiterrorista “va muy bien” y por eso ahora se permite hablar del “principio del fin” de ETA. Si se ha llegado a ese punto, reiteró, es entre otras cosas porque durante la última tregua “se hicieron las cosas bien” y la banda terrorista salió de aquel proceso “derrotada política y policialmente”.
A los ataques del PP, aseguró, “contestaciones y respuestas tengo”, de hecho alguna ha dado ya en el Parlamento, subrayó, pero se negó a darlas desde la mesa de portavoz del Consejo de Ministros.
Fue en el Parlamento donde tachó de “bazofia” el contenido de las supuestas actas de ETA, y a esa reflexión se remitió una y otra vez para responder, por ejemplo, a la pregunta de si hubo intento de acercamiento por parte del Gobierno en otoño de 2007, meses después del atentado de la T-4 de Barajas, o si otorga a esas actas menos credibilidad que a las de asambleas internas de la banda.
Por no polemizar con el PP, tampoco quiso responder al ex presidente del Gobierno José María Aznar y a su comparación de esa tregua con el Gal. “Las cosas que dice se comentan por sí mismas” y es mejor no valorar “lo que le pasa por la cabeza” o incluso “por las tripas”, donde a veces algunas cosas “se quedan atascadas”.