Eva Longoria controla sus entrevistas con severidad

La atractiva actriz irradia espontaneidad y simpatía en sus conversaciones con la prensa, dando la impresión de que no le cuesta afrontar públicamente los asuntos más controvertidos de su vida personal. Sin embargo, como revela el periodista neozelandés Adam Dudding, Eva exige conocer de antemano los cuestionarios de sus entrevistas y censura previamente las preguntas que no le apetece contestar."Al comenzar la entrevista telefónica, me quedé mirando a la absurda lista de temas sobre los que estaba autorizado a preguntarle. Acepté de mala gana ciertas restricciones en nuestra conversación, pero no me quedó más remedio que enviarle el cuestionario por adelantado, y ver cómo eliminaban seis preguntas que trataban asuntos tan inocentes como su relación con Victoria Beckham, o los lugares que iba a visitar en Nueva Zelanda", reveló el periodista en el portal stuff.co.nz.La artista no siempre se encuentra de humor para tratar temas como sus divorcios, sus negocios ajenos al mundo de la interpretación, o incluso el rendimiento que le da en su profesión a su título universitario de kinésica, disciplina que analiza los elementos de la comunicación no verbal."Entre los temas que están fuera de órbita se encuentran sus matrimonios fallidos con Tyler Christopher y Tony Parker, y el fracaso del restaurante en el que invirtió. Tampoco me dejó que le preguntara por la utilidad de su licenciatura en kinésica, y su representante me advirtió de que si sobrepasaba los límites me cancelaría la entrevista. Así que al final acabamos hablando de moda. Eso sí, ella fue muy amable", explicó en su artículo.