Expertos y víctimas piden en Argentina una lucha común contra trata personas

Mar Centenera

Buenos Aires, 4 sep.- Expertos, funcionarios y víctimas pidieron hoy a la sociedad tomar conciencia de la trata de personas y enfrentarse unidos a este flagelo mundial durante el "II Foro Internacional sobre los Derechos de las Mujeres", que comenzó hoy en la ciudad argentina de Mar del Plata.

"La trata no es algo que le pasa solo a la víctima, nos pasa a todos. Por eso tenemos que estar juntos. Un pueblo que le dice no a la trata es invencible", declaró a Efe la ministra de Gobierno de la provincia de Buenos Aires, Cristina Álvarez Rodríguez.

Ante más de mil personas, Álvarez Rodríguez inauguró el evento y aseguró que este delito, al que calificó como "la esclavitud del siglo XXI", es una realidad dolorosa.

Sus palabras fueron precedidas por una carta del papa Francisco, en la que instó a los participantes a "buscar estrategias que defiendan a los más vulnerables" y que permitan "sensibilizar una sociedad que consume dignidad humana, que consume pornografía y en la que todo se compra con dinero, incluso la persona".

El pontífice pidió también que los explotadores "no encuentren cobertura en las leyes del bienestar, en las normas de comercio ni en sofismas judiciales" en su misiva, leída por monseñor Arnaldo Catalán.

Cada año, más de 1,3 millones de personas son rescatadas en el mundo de redes de trata, recordó Álvarez Rodríguez, quien indicó que la mayoría de las víctimas pertenece a los sectores más vulnerables, que son engañados con promesas económicas.

Una de ellas fue la colombiana Marcela Loaiza, quien este jueves ofreció su sobrecogedor testimonio en el foro.

Con 21 años, voló a Japón para trabajar como bailarina, pero al llegar al país asiático fue recluida y explotada sexualmente por la mafia yakuza durante 18 meses.

"Sufrí todas las modalidades de prostitución, lo más degradante que cualquier ser humano pueda vivir", relató a Efe Loaiza, quien indicó que la mafia le exigía una deuda de 50.000 dólares para liberarla.

Tras escapar y regresar a Colombia, Loaiza recibió apoyo terapéutico, ya que al principio "ni era capaz de hablar", y volcó sus dolorosas experiencias en dos libros, "Atrapada por la mafia yakuza" y "Lo que fui y lo que soy".

Además, creó una fundación que se dedica a combatir la trata y a concienciar para evitar que otras jóvenes colombianas sufran lo mismo.

"Los tratantes saben cómo manipular a las jóvenes en vulnerabilidad", dijo Loaiza, quien afirmó que "el problema de la trata en el mundo es la falta de oportunidades de empleo y de educación".

Aunque la prostitución "es el rostro más amargo" de este delito que no conoce fronteras, Rodríguez Álvarez subrayó que el 52 % de las víctimas en Argentina son casos de explotación laboral en condiciones infrahumanas en talleres clandestinos y plantaciones, entre otros lugares.

"Los talleres clandestinos son una de las formas de esclavitud modernas", alertó la funcionaria, quien también preside el Consejo Provincial de las Mujeres.

Según la ministra, la aprobación de la ley contra la trata en Argentina en 2012, junto a políticas activas para visibilizar el problema y proteger a las víctimas han permitido "que la situación en el país haya mejorado" en los últimos años, aunque destacó que queda mucho trabajo por hacer "porque mientras hablamos, la trata sigue ocurriendo".

El "II Foro Internacional sobre los Derechos de las Mujeres. Trata y Tráfico de Personas" transcurrirá entre este jueves y viernes en Mar del Plata, a 400 kilómetros al sur de Buenos Aires.

Entre los invitados figuran también la directora regional contra el tráfico de mujeres y niñas de América Latina y el Caribe, la mexicana Teresa Ulloa Ziáurriz; la fiscal paraguaya Teresa Martínez Acosta, y el sociólogo canadiense Richard Poulin.