Expresidente de la I.Socialista ve democráticas las críticas de los jóvenes

Valencia, 12 feb.- El ex presidente de la Unión Internacional de Juventudes Socialistas (IUSY) Joan Calabuig ha asegurado hoy que las críticas y reivindicaciones de los jóvenes socialistas a los dirigentes de la Internacional Socialista (IS) entran dentro de la "normalidad democrática".

En declaraciones a EFE, el actual portavoz del PSPV-PSOE en el Ayuntamiento de Valencia, que presidió la IUSY entre 1985 y 1989, ha mostrado su apoyo al discurso "reivindicativo" de la secretaria general de la IUSY, Beatriz Talegón, ante los asistentes al último consejo de la IS, celebrado en Cascais (Portugal).

Talegón exigió que las cuentas de la IS no sean un "misterio", rechazó que los militantes jóvenes solo sirvan para "aplaudir" y acusó a los dirigentes de ser los responsables "de lo que está pasando" y de no preocuparles "en absoluto" su situación.

Joan Calabuig ha admitido "con dolor" que parte de las críticas de los últimos tiempos a la IS "se las merece" y ha apuntado que es "una organización antigua" que debe hacer "más esfuerzo por adaptarse a la realidad del mundo actual" con los mecanismos que tiene para "modernizarse, renovarse y actualizarse".

En opinión de Calabuig, la censura de Talegón a que esas reuniones se hagan en hoteles de cinco estrellas y que los delegados lleguen en coches de lujo son "una anécdota" frente al contenido político reivindicativo de su intervención.

"El discurso de Beatriz me parece reivindicativo, razonable y con el que estoy en gran parte de acuerdo; luego hay cuestiones más anecdóticas como los coches y los hoteles de lujo, que son más difíciles de valorar", ha apuntado.

A su juicio, Talegón "ha cumplido el papel crítico que le corresponde desde la visión de los jóvenes socialistas" por su reivindicación de un mayor apoyo por parte de los partidos de la IS, mayores recursos para el desarrollo de actividades y que se les escuche más, reivindicaciones que él dice compartir.

Según Calabuig, por su propia experiencia sabe que las relaciones entre las organizaciones juveniles y sus propios partidos "nunca son fáciles; son complicadas porque las sensibilidades a veces no son exactamente las mismas".

"Igual que le ha pasado a Beatriz, me pasó a mí porque hay momentos en que en las reuniones de la Internacional, se critica su línea y eso entra dentro de la normalidad de los debates abiertos en una sociedad democrática", ha señalado.