Uagadugu, 14 jul.- Burkina Faso expulsará a 566 soldados del Ejército, de los que 217 serán juzgados en los tribunales, por una serie de motines militares ocurridos este año en todo el país, anunció hoy el jefe del Estado Mayor de la Fuerzas Armadas, coronel Honoré Naberé Traoré.
"Las sanciones al personal militar son un contundente mensaje al país de que las Fuerzas Armadas están dispuestas a seguir siendo republicanas y respetuosas con las leyes, y leales a la nación', dijo Traoré en una conferencia de prensa en Uagadugu.
Los soldados fueron acusados de "incitar al desorden", falta de moral e incumplimiento de las normas militares.
Burkina Faso ha afrontado, desde el pasado mes de marzo, una oleada de motines del Ejército, incluso dentro de la Guardia de seguridad del presidente del país, Blaise Compaoré, en protesta por su situación económica.
Desde marzo, guarniciones de todo el país se han amotinado y llevado a cabo violentas protestas por sus condiciones económicas, que estuvieron precedidas por manifestaciones estudiantiles en febrero.
El último motín, en el mayor acuartelamiento del país, en Bobo-Dioulasso (segunda mayor ciudad del país), tuvo lugar el pasado junio y fue, por primera vez, sofocado por la fuerza por tropas especiales, con el resultado de siete muertos, seis de ellos militares y una niña de 14 años.
Desde febrero, Compaoré ha sustituido al primer ministro y su Gobierno, todos los altos mandos militares y de la Policía, diversos altos cargos de la Administración e incluso a algunos directivos de empresas públicas, con el fin de sofocar los levantamientos.
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