Extinguen el incendio de Las Batuecas e intensifican la investigación

Serradilla del Arroyo (Salamanca).- El incendio forestal declarado hoy en la zona salmantina de Serradilla del Arroyo, en el Parque Natural de Las Batuecas, ya está extinguido, tras lo que la Guardería Forestal y el SEPRONA buscan indicios en la zona calcinada para intentar dar con el autor o autores.

Los vecinos de Serradilla del Arroyo y de Serradilla del Llano, municipios que distan entre sí un kilómetro y medio, se dieron cuenta del fuego a las 12:00 horas, cuando notaron el olor a humo, debido al fuerte viento, según han explicado a Efe fuentes del Ejecutivo autonómico.

En ese momento, un vecino de Serradilla del Arroyo alertó en un bar del pueblo que salía humo de un pinar, en una zona denominada "La Ladera", motivo por el que dieron el aviso a los agentes medioambientales de la zona.

Esta alerta supuso la movilización de los helicópteros de las bases salmantinas de El Bodón y El Maíllo, que realizaron varias descargas sobre el lugar del incendio, motivo por el que lo controlaron con rapidez y evitaron que las llamas se propagaran por un pinar de varias decenas de hectáreas, ubicado entre los términos de Serradilla del Arroyo y Serradilla del Llano.

La Junta considera según los primeros datos disponibles que el incendio ha sido intencionado, lo que supone el cuarto fuego desatado en esta zona que se supone provocado a propósito desde el pasado julio.

El primero tuvo lugar el 17 de julio, el segundo el 24 de julio y el tercero el pasado 27 de julio, cuando se calcinaron 35 hectáreas de monte y fueron movilizados medios aéreos y terrestres de Salamanca y Cáceres.

Durante la jornada de hoy, además de los medios aéreos, han participado en la extinción tres agentes medioambientales (encargados de coordinar los trabajos de extinción), un bulldozer (maquinaria pesada), dos camiones de bomberos, cuatro cuadrillas, además de agentes de la Guardia Civil.

En el lugar incendiado, donde finalmente las llamas han arrasado menos de una hectárea, aún permanece personal de la Junta de Castilla y León para vigilar la zona y con el fin de que no se reproduzcan las llamas.

Esta zona de la provincia de Salamanca es uno de los lugares de Castilla y León donde más incendios forestales intencionados se declaran cada verano, desde hace una decena de años.