Generalitat: delegación Gobierno no pidió operativo preventivo en Jefatura

  • El departamento de Interior de la Generalitat ha informado hoy de que la delegación del Gobierno en Cataluña no pidió el apoyo de los Mossos para proteger la seguridad de la Jefatura Superior de Policía en la Via Laietana con anterioridad a la manifestación por la huelga en Barcelona.

Barcelona, 14 nov.- El departamento de Interior de la Generalitat ha informado hoy de que la delegación del Gobierno en Cataluña no pidió el apoyo de los Mossos para proteger la seguridad de la Jefatura Superior de Policía en la Via Laietana con anterioridad a la manifestación por la huelga en Barcelona.

Fuentes de Interior consultadas por Efe han lamentado lo que considera "contradicciones" de la delegación del Gobierno en Cataluña puesto que, según su versión, sólo se pidió la ayuda de los Mossos una vez que ya se estaban produciendo incidentes tras la manifestación por la huelga, y no se hizo de forma preventiva.

Fruto de estos incidentes, diversos incontrolados han quemado esta noche dos furgonetas del Cuerpo Nacional de Policía, que han quedado totalmente inutilizadas, así como un vehículo de camuflaje, en unos actos vandálicos registrados en la Via Laietana, en el centro de Barcelona.

La delegada del Gobierno en Cataluña, María de los Llanos de Luna, lamentó que los Mossos d'Esquadra no hubiesen acudido a la llamada de apoyo que le ha hecho la Jefatura Superior de la Policía Nacional.

Sin embargo, la versión del departamento de Interior es que, ante la jornada de huelga, la delegación del Gobierno sólo requirió de forma preventiva del apoyo de los Mossos para su sede de la calle Mallorca, en Barcelona, pero no para la Jefatura, en donde por la mañana observaron un perímetro de vallas interpuestas que por la tarde se retiraron, según Interior.

El departamento que dirige el conseller Felip Puig admite haber recibido una llamada para proteger la sede de la Jefatura en la Via Laietana una vez iniciados los incidentes, pero en un momento que no hacía posible acudir con rapidez debido a que los Mossos, ya distribuidos, debían controlar una manifestación de 110.000 personas más una segunda protesta, de un perfil más violento, de unas 8.000 personas, según la conselleria.

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