México, 13 dic.- El gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre, destituyó hoy a tres altos funcionarios de ese estado del sur de México, entre ellos el fiscal y el jefe de la policía, tras los disturbios que ayer dejaron dos estudiantes muertos y a uno más en coma.
"He separado de sus cargos el día de hoy al licenciado Alberto López Rosas, quien fungía como procurador de Justicia", así como al subsecretario y subsecretario de Seguridad Pública, Ramón Almonte y Ramón Arreola, "de quien dependía la policía", dijo el gobernador.
En declaraciones a la emisora Radio Fórmula, Aguirre indicó que decidió separar de sus cargos a estos funcionarios con el fin de que "se transparenten, se faciliten, las investigaciones".
Además, el gobernador, aupado al poder el pasado 1 de abril por el izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), solicitó a la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía) que se haga cargo plenamente del caso para tratar de que no haya impunidad.
Dijo que ya le pidió a la procuradora Marisela Morales que la fiscalía general tome el caso "dado que, además, es un delito que en algunas de sus partes se tipifica como federal".
Aguirre indicó que lo que le interesa es que "gente externa" acuda al estado y realice "las investigaciones necesarias" e incluso manifestó estar dispuesto a abrir "una fiscalía especial sobre estos hechos".
Ayer un bloqueo de la Autopista del Sol a la altura de Chilpancingo, capital del sureño estado de Guerrero, por parte de estudiantes derivó en un tiroteo en el que murieron los estudiantes Gabriel Echeverría y José Alexis Herrera Pino.
Por los hechos fueron detenidas 24 personas, de las cuales prácticamente todas han sido ya liberadas, tras haberles deslindado de la violencia.
Entre los aún arrestados hay un sujeto que lanzó un cóctel Molotov contra una gasolinera, acción que desencadenó la violencia, y otro de 19 años natural de Acapulco, identificado como Gerardo Santiago Peña, quien portaba un fusil AK-47 que fue disparado en siete ocasiones.
Por el momento se desconoce si esos tiros fueron los que hirieron de muerte a los estudiantes.
Además, está arrestado "un agente ministerial (policía de la fiscalía)", quien en varias fotos publicadas hoy en la prensa aparece vestido de civil, con un arma larga y en posición de disparo hacia los manifestantes.
Los compañeros de los fallecidos habían pedido hoy en conferencia de prensa la cabeza de dos de los tres funcionarios ya cesados, así como la apertura de un "juicio político" contra el gobernador de Guerrero por los hechos.
El nuevo fiscal de este estado del sur de México es Alejandro Paz y Puente, quien se desempeñaba como subprocurador de Control Regional.
El titular de Seguridad Pública es Humberto Calvo, quien era subsecretario de Protección Civil; y el nuevo subsecretario, el teniente Leonardo Vázquez.
Amnistía Internacional (AI) demandó hoy a las autoridades mexicanas iniciar una "investigación inmediata e independiente" por la muerte de los estudiantes, que "levanta una honda preocupación sobre la actuación de la policía en cuanto a disturbios públicos".
"La policía en México tiene la obligación de mantener el orden y proteger a la población civil de la violencia, por ello, cualquier uso excesivo de fuerza (...) debe manejarse decisivamente, llevando a los responsables ante la justicia", dijo Rupert Knox, investigador de la sección mexicana de AI.
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