Gobernador mexicano asegura que Nuevo León es ya un modelo en seguridad

  • El gobernador mexicano Rodrigo Medina aseguró hoy que el norteño estado de Nuevo León ya es un modelo de seguridad para otras regiones del país, tras lograr la reducción de los niveles de violencia del crimen organizado.

Julián Rodríguez Marín

México, 19 jun.- El gobernador mexicano Rodrigo Medina aseguró hoy que el norteño estado de Nuevo León ya es un modelo de seguridad para otras regiones del país, tras lograr la reducción de los niveles de violencia del crimen organizado.

La guerra entre las organizaciones criminales por el control del territorio para el trasiego de drogas hacia Estados Unidos desataron una crisis en materia de seguridad en Nuevo León con asesinatos masivos, extorsiones, secuestros y bloqueos en las calles.

"El punto más álgido fue entre 2009 y 2011, tres años de intensa violencia", indicó el político del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), de 41 años, en una entrevista con Efe.

Monterrey, capital de Nuevo León y principal centro industrial del país, vivió el 25 de agosto de 2011 el mayor ataque a la población civil perpetrado por el crimen organizado en México cuando un grupo de Los Zetas incendió a plena luz del día un casino y mató a 52 personas porque sus dueños se negaban a ser extorsionados.

Después "se logró abatir la violencia" a tal punto que "somos el estado que más ha reducido los índices delictivos hasta ser un modelo para otras entidades", apuntó Medina, quien destacó que en 2013 la cifra de homicidios dolosos se ubicó en 503 casos, un 57 % inferior a la registrada en 2012.

En el primer cuatrimestre de 2014 se registraron tres homicidios por cada 100.000 habitantes, dos menos que los registrados en el 2012.

El robo de vehículos bajó de 2.279 en promedio mensual en 2011 a 234 casos este año, la menor tasa per cápita del país después de tener la más alta, indicó el gobernador, quien también aludió al descenso del número de secuestros, un delito poco denunciado en México.

Medina, quien asumió las riendas del estado el 4 de octubre de 2009, dijo que la clave para lograr esos resultados fue la depuración de las corporaciones policiales y la fiscalía, de donde se expulsaron a más de 4.000 elementos.

"Les quitamos el arma, la placa y el auto, son personas que colaboraban con los grupos más por miedo que por interés económico", y así "ya no les sirven a los criminales", indicó.

Además, el Gobierno creó la Fuerza Civil, que actualmente cuenta con 4.000 agentes pero llegará hasta los 7.000, y reforzó el trabajo de inteligencia.

Para prevenir la llegada de criminales de estados vecinos como Tamaulipas, donde el Gobierno federal desplegó en mayo pasado más soldados y policías para recuperar la seguridad, dijo que han puesto en marcha un operativo.

"Hemos capturado a operadores de los grupos criminales que tratan de salir del estado (...) sin llamar la atención y con el más bajo perfil", afirmó.

Medina, cuya gestión terminará en 2015, reconoció que aún se registran delitos en el estado, pero la incidencia es menor y la población "está tranquila" y "siente el cambio".

Sin embargo, "no bajamos la guardia", apuntó el también abogado, quien aseguró que para su Gobierno es lo "mismo el crimen común que el organizado".

"La inseguridad ya no es un problema en Nuevo León, ahora nos enfocamos al crecimiento económico", resaltó el gobernador de este estado que comparte 14 kilómetros de frontera con EE.UU., por donde fluye casi el 60 % del comercio exterior del país.

Nuevo León, con casi 5 millones de habitantes, aporta el 8 % del PIB mexicano y tiene PIB per cápita más alto del país, con 20.000 dólares, mientras que el promedio nacional se sitúa en 15.600 dólares.

En 2013 recibió una inversión extranjera por 3.600 millones de dólares, una cifra que se espera rebase los 4.000 millones de dólares al cierre de 2014.

Mostrar comentarios