Sevilla, 21 sep.- El ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, ha advertido hoy de que "un país no puede estar cambiando todos los años su legislación laboral" y ha afirmado que lo que España necesita es desarrollar las reformas emprendidas en el último año y medio, que ha definido como "intenso" en este sentido.
El ministro, que ha inaugurado hoy en Sevilla el X Congreso Europeo de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social, ha hecho un balance de la política laboral de esta legislatura, en la que el Gobierno, según ha dicho, ha intentado "no perder el tiempo mientras se producía la crisis".
"En momentos difíciles no hemos renunciado a seguir reformando instituciones básicas como son las del mercado de trabajo", ha manifestado el ministro, que ha indicado que "España recuperará su pulso y su nivel de empleo, pero mientras tanto hemos intentado aprovechar el tiempo con las reformas realizadas".
Gómez ha advertido de que el objetivo ahora debe ser "desplegar esas reformas, hacer que funcionen, tratar de obtener de ellas el máximo rendimiento y probarlas también en un contexto de recuperación económica, de auge y no sólo de crisis".
"Más que producir reformas en la legislación laboral lo que el país necesita es desarrollar las que se han emprendido durante el último año", ha resaltado, para añadir que "un país no puede estar cambiando todos los años de legislación laboral".
El titular de Trabajo ha repasado las "grandes reformas" que comenzaron con la laboral de 2010, que en su opinión -y a pesar de la oposición de los sindicatos- "se inserta en la mejor tradición de la política laboral española del último cuarto de siglo" además de combinar "flexibilidad con seguridad".
Ha recordado que a esa iniciativa le sucedió el pasado febrero un "acuerdo muy importante" sobre la reforma del sistema de pensiones, ya que "en un momento de dificultad del conjunto de la economía el Gobierno y los interlocutores sociales fueron capaces de ponerse de acuerdo en un tema esencial".
A partir de ahí, según Gómez, "daba la impresión de que el resto de legislatura podía fraguarse alrededor de un importante entendimiento entre los interlocutores sociales", sobre todo en materia de negociación colectiva, algo que no se produjo, en su opinión, "por la cercanía de las elecciones municipales de mayo".
El ministro ha argumentado que el Gobierno "hizo frente a esa situación con las mismas armas que siempre defendió: la ausencia de resultados en el diálogo social no debía suponer ninguna suerte de veto sobre la necesidad de seguir gobernando", ha subrayado, por lo que el Ejecutivo "hizo lo que había advertido: seguir gobernando".
Ha destacado también entre las últimas medidas puestas en marcha la prolongación de las ayudas a los parados que agotan las prestaciones por desempleo, que considera "fundamentales", ya que "estamos recorriendo un terreno desconocido", ha dicho, y "lo hacemos con un sistema de protección concebido para duraciones de crisis más bien cortas".
Por último Gómez ha resaltado la reforma "profunda" del contrato para la formación y el aprendizaje, a su juicio, "solo la primera parte de la reforma intensa que necesita el país" para acabar "lo más rápidamente posible con la tasa de desempleo juvenil" que supera el 45 %.
El responsable de Trabajo ha considerado que, si se quiere conseguir ese objetivo, "hay que alternar formación y empleo", y ha insistido en que "el gran reto de los próximos años no es sólo crear empleo, sino crearlo para los jóvenes", con tasas de desempleo que duplican las generales. EFECOM
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