Nueva York, 25.- La costarricense Rebeca Grynspan dijo hoy que buscará reforzar el papel de la Secretaría General Iberoamericana (Segib), para el que fue elegida ayer, a fin de apoyar el avance en la integración latinoamericana.
Grynspan, quien fue elegida ayer por los cancilleres para asumir el cargo el próximo 1 de abril, afirmó hoy en unas declaraciones a Efe que la Segib puede hacer "un aporte muy valioso a la región", especialmente en las áreas social, cultura y economía.
La economista costarricense, quien desde 2010 es secretaria general adjunta de la ONU y administradora asociada del PNUD, consideró también "muy importante" seguir las ideas sobre la reforma de la Segib presentado en la pasada Cumbre Iberoamericana de Panamá.
Sobre sus proyectos para cuando asuma el cargo, que tiene un mandato de cuatro años, Grynspan dijo que le gustaría "fortalecer" todas las cuestiones relacionadas con la política de género, así como "enseñar el mundo" todo lo que se ha hecho en los últimos años en la región iberoamericana en este campo.
También quiere potenciar "la proyección de Iberoamérica hacia el resto del mundo", hacia regiones como la Unión Europea, Asia o África.
En este sentido, valoró el apoyo de los tres países de la Península Ibérica (España, Portugal y Andorra) hacia la proyección latinoamericana en la Unión Europea.
Grynspan resaltó que, a pesar de que en los últimos años han surgido nuevas instancias de cooperación e integración en América Latina, que se han sumado a las ya existentes, no supone un problema.
Según ella, cuanto más se relacionen los países "más posibilidades" existen para "resolver las cosas por las vías adecuadas".
"La idea de la Segib no es sustituir a ninguna de ellas, sino complementarlas, especialmente a la Celac", afirmó.
Grynspan cree que el organismo que dirigirá "debe proponerse sumar y no restar en términos de las distintas configuraciones en America Latina", y en este sentido recalcó que "la Segib tiene ámbitos que son realmente muy propios".
La costarricense reconoció que en la región "hay una gran diversidad" de tendencias políticas en los gobiernos, pero consideró que se trata de "las diferencias normales que son parte de las opciones democráticas que cada pueblo toma".
Aún así, recalcó que la región es "una zona de paz" con "lazos de respeto dentro de la diversidad", algo que considera que "hay que resaltar".
En un lado más personal, Grynspan, de 59 años, afirmó que se siente "muy contenta y muy honrada" de su elección para el puesto aunque admitió que implica "grandes retos", especialmente después del liderazgo del Enrique Iglesias.
Además, señaló que le hace "mucha ilusión vivir en Madrid", donde está la sede de la institución, ya que es una ciudad "estupenda" y "estoy lista para hacer ese cambio".
De momento, este mes de marzo lo pasará "cerrando las cosas que tengo pendientes" en el PNUD para poder dejar lista la transición hacia el nuevo cargo, recalcó.
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