Hollande aboga por desplegar una misión africana para estabilizar la RCA

Johannesburgo, 14 oct.- El presidente de Francia, François Hollande, se mostró hoy partidario de desplegar una misión africana apoyada por la ONU para estabilizar la situación de la República Centroafricana (RCA), país que a su juicio requiere una actuación "urgente".

Así lo indicó durante una rueda de prensa ofrecida en Pretoria junto a su homólogo sudafricano, Jacob Zuma, en el inicio de una visita oficial de dos días a esta nación.

"Pensamos que es necesario movilizar a la Unión Africana (UA) y al Consejo de Seguridad de la ONU para (crear) una fuerza que ayude a alcanzar la estabilidad en la RCA", señaló el presidente galo.

Hollande remarcó además la necesidad de que sean los países africanos los que se ocupen de sus propios asuntos de seguridad.

El presidente sudafricano apoyó esta propuesta y advirtió de que las elecciones presidenciales de la RCA, previstas para 2015, no podrán celebrarse si no se pone fin a la situación de caos que vive el país.

Zuma, que no concretó el papel que Sudáfrica desempeñaría en esta intervención, ya envió tropas para apoyar al Gobierno depuesto de Bangui, que cayó el pasado mes de marzo tras una ofensiva de los rebeldes que costó la vida a 14 soldados sudafricanos.

El ministro de Exteriores galo, Laurent Fabius, visitó ayer la capital de la RCA, donde se reunió con el presidente y antiguo líder rebelde Michael Djotodia, a quien prometió más apoyo militar y emplazó a cumplir su promesa de convocar elecciones en 2015.

La ONU anunció la semana pasada que va a estudiar el envío de "cascos azules" a la RCA para intentar restablecer el orden en el país.

El Consejo de Seguridad aprobó entonces por unanimidad y a iniciativa francesa una resolución que prevé ayudar inicialmente a la misión que la UA aprobó en julio pasado para ese país (Misca).

La resolución insta a los países africanos a participar en la misión y a otros miembros de la ONU a darle su apoyo.

París, que mantiene a unos 450 soldados en suelo centroafricano, ha descartado una intervención francesa como la de finales del año pasado en Mali para evitar que las milicias islámicas se hicieran con el control del país.

La situación en la República Centroafricana comenzó a deteriorarse con la rebelión de la coalición Séléka, que se alzó en armas en el norte del país en diciembre pasado al considerar que el entonces presidente, François Bozizé, no había respetado unos acuerdos de paz firmados en 2007.

La coalición tomó la capital, Bangui, el pasado 24 de marzo, tras lo cual fue destituido Bozizé, aunque después se ha dividido en disputas internas, lo que ha creado una situación de desgobierno y falta de seguridad en el país.