Hospitalizada la exvicepresidenta taiwanesa en huelga de hambre

  • La exvicepresidenta taiwanesa Annette Lu, del independentista Partido Demócrata Progresista (PDP), fue hospitalizada hoy en Taipei tras 82 horas en huelga de hambre para pedir la liberación del expresidente Chen Shui-bian.

Taipei, 1 ene.- La exvicepresidenta taiwanesa Annette Lu, del independentista Partido Demócrata Progresista (PDP), fue hospitalizada hoy en Taipei tras 82 horas en huelga de hambre para pedir la liberación del expresidente Chen Shui-bian.

Lu, de 70 años de edad, inició su ayuno el pasado domingo para exigir la inmediata libertad provisional por motivos médicos de Chen, quien cumple pena de prisión por corrupción y a quien acompañó como vicepresidenta durante dos mandatos del 2000 al 2008.

Tras casi cuatro días sin ingerir alimentos, la exvicepresidenta fue ingresada en un ingresada en un hospital de la capital taiwanesa, donde ahora guarda reposo.

La antigua dirigente de Taiwán considera que Chen fue condenado injustamente debido a interferencias políticas y que su deteriorado estado físico está empeorando preocupantemente debido a su mantenimiento en prisión, por lo que reivindica que sea trasladado a su hogar y reciba allí tratamiento médico.

Lu dijo, en una conferencia de prensa previa a su huelga de hambre, que su acción no sólo busca defender los derechos humanos de Chen, sino también mostrar su aprecio por el expresidente y contribuir a aliviar la polarización política en la isla y fomentar la reconciliación.

El Ministerio de Justicia ya atendió una petición de Chen para su liberación provisional y ha iniciado el proceso para su liberación, tras un dictamen unánime de un equipo de 16 médicos, que favorece la liberación de Chen, pero no quiere conceder trato especial y acelerar la liberación del ex presidente.

El viceministro de Justicia, Chen Ming-tang, explicó que, siguiendo el proceso normal, está prevista una decisión sobre la liberación provisional de Chen para el mediodía del lunes que viene.

Chen, encarcelado desde el 2008, fue condenado a 20 años de cárcel por corrupción y falsificación de documentos, cargos de los que siempre se ha declarado inocente.

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