Humala cierra crisis policial con jura de nuevo ministro del Interior

  • El presidente de Perú, Ollanta Humala, tomó hoy juramento al nuevo ministro del Interior, Walter Albán, para intentar cerrar la crisis surgida a raíz de la protección policial indebida a un procesado por corrupción vinculado con el ex asesor de inteligencia Vladimiro Montesinos.

Lima, 19 nov.- El presidente de Perú, Ollanta Humala, tomó hoy juramento al nuevo ministro del Interior, Walter Albán, para intentar cerrar la crisis surgida a raíz de la protección policial indebida a un procesado por corrupción vinculado con el ex asesor de inteligencia Vladimiro Montesinos.

En una ceremonia en el Palacio de Gobierno, el mandatario tomó el juramento de Albán, seis días después de la renuncia de Wilfredo Pedraza, su antecesor y quien pidió la dimisión de seis jefes policiales en la última semana a raíz de este caso.

La situación de Pedraza en el ministerio del Interior se complicó la semana pasada con la revelación de una investigación periodística del canal Willax sobre la vigilancia policial que se brindaba, desde hace un año y medio, en la casa del empresario Oscar López Meneses.

Tras su juramentación, Albán dijo al canal TV Perú que espera poder trabajar de la mano con la Policía y con todas las organizaciones implicadas en su sector.

Albán tendrá a cargo una revisión de los protocolos de inteligencia para realizar una reestructuración en la Policía Nacional, tal como adelantó el lunes el mandatario peruano.

"Yo estoy para coordinar y, de alguna manera, para gerenciar lo que toca al sector Interior, pero de ninguna manera trabajar solo", dijo Albán, que fue Representante Permanente del Perú ante la Organización de Estados Americanos (OEA) en los últimos dos años.

El jefe de Estado afirmó este lunes que "malos elementos" de la policía peruana trafican con el servicio de vigilancia y protección y negó conocer a López Meneses, como afirmó el empresario a medios locales.

Después de la ceremonia, Humala sostuvo una reunión de trabajo con Albán, con el director de la Policía Nacional, Jorge Flores, y con altos mandos policiales sobre la seguridad ciudadana y la revisión de las políticas en el sector.

López Meneses fue procesado por la justicia peruana por los delitos de peculado, tenencia ilegal de armas e interceptación telefónica bajo la sospecha de haber sido uno de los colaboradores de la mafia del exasesor presidencial Vladimiro Montesinos, condenado por corrupción.

El empresario fue condenado a seis años de cárcel en 2005 por peculado, pero apeló y luego la sentencia prescribió.

La denuncia periodística añadió que López Meneses tendría ahora vínculos con un asesor presidencial de Humala para temas de defensa y seguridad, Adrián Villafuerte, quien también renunció el pasado viernes, y que estaba a cargo de realizar seguimientos e interceptación telefónica de políticos y periodistas.

La Fiscalía de la Nación ingresó a la casa de López Meneses, tras la denuncia periodística, pero no encontró ningún equipo de interceptación de las comunicaciones.

La orden de dar el resguardo policial fue otorgada por el hoy exdirector de la Policía Raúl Salazar, quien aseguró que se lo pidió el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, José Cueto.

No obstante, Cueto negó haber pedido protección domiciliaria para Salazar, a quien tildó de "mentiroso".

El escándalo generó un agrio enfrentamiento entre los máximos jefes de las fuerzas armadas y policiales, pero Humala decidió mantener en sus cargos a Cueto y a Flores.

Los legisladores opositores Mauricio Mulder y Julio Gagó criticaron que Humala reduzca el caso a un tema de corrupción policial y que haya enfrentado a militares y policías respecto a su responsabilidad en este caso.

El partido de Humala, Gana Perú, atribuyó el lunes el escándalo a una supuesta "maniobra desestabilizadora" de sectores vinculados al "fujimontesinismo" y al partido Aprista del expresidente Alan García.

Los portavoces de cuatro bancadas en el Parlamento pidieron hoy formar una comisión investigadora sobre este caso.

Este cambio en el gabinete se produce 19 días después de que asumiera el presidente del Consejo de Ministros, César Villanueva, quien se presentará mañana ante el Congreso para exponer su plan de trabajo y pedir su voto de confianza, según un acuerdo del Consejo Directivo del Parlamento.

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