Inversiones faraónicas, gestión sin control y adjudicaciones por amistad, la losa de teddy bautista al frente de la sgae


La SGAE necesita una "refundación" que acabe con las malas prácticas en la gestión detectadas en la etapa de gobierno de Teddy Bautista, como las aventuras inversoras "mastodónticas", la falta de control interno al presidente y la "frivolidad y la ligereza" con la que se hicieron algunos contratos como el de José Luis Rodríguez Neri, principal imputado en la trama de la SGAE.
Son las principales conclusiones recogidas en el informe de la comisión de investigación creada por la SGAE el pasado julio tras las irregularidades en las cuentas de la entidad halladas por la Audiencia Nacional.
El presidente de la comisión, el catedrático de Derecho Civil y exmagistrado del Tribunal Supremo Ramón López Vilas, presentó hoy estas conclusiones durante una rueda de prensa en la sede de la SGAE. El informe es el resultado de una auditoría realizada por la consultora Ernst & Young, en la que se han entrevistado a 49 altos cargos de la SGAE, entre ellos el propio Teddy Bautista el pasado 18 de noviembre.
La comisión ha acreditado que la SGAE facturó 40 millones de euros entre 1999 y 2010 a la empresa de Neri, Microgénesis, por contratos que no se adjudicaron tras un debido contraste previo de ofertas ni con las supervisiones debidas.
"Se contrató al señor Neri con frivolidad y ligereza. Teddy Bautista nombró a Neri porque era amigo suyo, un músico de rock al que conoció en sus años mozos", explicó López Vilas.
La comisión cree que la SGAE se embarcó durante años en inversiones "elefantiásicas" y "megalómanas", sobre todo en compra de teatros a través de su proyecto Arteria, que le alejaron de su objetivo inicial de entidad recaudadora por los derechos de los autores.
Sobre la gestión de Bautista al frente de la SGAE, López Vilas dijo que a cualquier analista le resulta llamativo que el presidente ejecutivo de la sociedad nombrara a los miembros del Comité de Dirección y estos no controlaran a su presidente.
Bautista ejerció un poder "omnímodo" y con "prepotencia" en la SGAE, y dejó a la sociedad "abocada a una devaluación funcional de sus órganos", en palabras del presidente de la comisión.
López Vilas cree que el Ministerio de Cultura debe reforzar su capacidad de tutela sobre la SGAE, que ha sido deficiente, porque se corre el peligro, si no, de que haya "17 SGAEs en las comunidades autónomas, que operen como un Ministerio de Cultura bis".
El exjuez dijo que el informe de la comisión debe verse como "un código de buenas prácticas" para que la SGAE acometa la refundación que necesita, "para que vuelva a sus raíces" y se aleje de aventuras "exageradas".

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