Dakar, 3 may.- La Comunidad Económica de Estados del África Occidental (CEDAEO) se reúne hoy en Dakar, en una cumbre extraordinaria, para tratar de hallar una solución a las crisis desatadas por los recientes golpes de Estado de Guinea Bissau y Mali.
La ONU se mostró optimista respecto al encuentro y auguró un resultado satisfactorio para el mismo.
"Esperamos y creemos que se podrá encontrar una solución", dijo el representante especial del secretario general de la ONU, Said Djinit, en declaraciones publicadas este miércoles por la Agencia de Prensa Senegalesa (APS).
El de hoy es el segundo encuentro extraordinario que el bloque regional celebra sobre las delicadas situaciones que atraviesan Guinea Bissau y Mali, después de la reunión de Abiyán del pasado jueves.
En esa cumbre, la CEDEAO decidió el envío de tropas a ambos países, así como el apoyo al retorno al orden constitucional.
La reunión de hoy reemplaza a la prevista, en la misma fecha y mismo lugar, entre los miembros del grupo de contacto de la CEDEAO para Guinea Bissau.
Sin embargo, el encuentro adquirió el estatus de cumbre después de los últimos acontecimientos en Mali, donde la junta militar ha rechazado el despliegue de tropas de la CEDEAO en el país para contribuir a estabilizar la situación en el norte, en manos de rebeldes tuareg.
En lo que respecta a Guinea Bissau, el fracaso de los esfuerzos del grupo de contacto de la CEDEAO -que se reunió en Banjul con los golpistas el pasado domingo para negociar la vuelta al orden constitucional- llevó al bloque regional a decidir la imposición de sanciones diplomáticas y económicas al país africano.
El golpe de estado en Guinea Bissau se produjo el pasado 12 mientras el país se encontraba en pleno proceso para celebrar la segunda ronda de sus comicios presidenciales, que estaban previstas para el pasado 29 de abril.
En Mali, los militares se levantaron en armas y derrocaron al entonces presidente, Amodou Toumani Touré, el pasado 22 de marzo, momento en el que asumió el poder una junta militar.
Desde entonces se ha nombrado a un presidente interino, Diondunda Traoré, y un Gobierno provisional dirigido por Cheikh Modibo Diarra que tiene como misión dirigir la transición y reunificar el país, cuya zona norte está en manos de rebeldes.
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