La ganadora de elecciones anuladas de Osetia Sur desmoviliza a sus seguidores

Moscú, 11 dic.- Alla Dzhióyeva, ganadora de las elecciones anuladas a la presidencia de la región separatista georgiana de Osetia del Sur, reconoció hoy la validez del acuerdo con el presidente saliente, Eduard Kokoiti, y llamó a sus partidarios a abandonar la protesta en el centro de la capital Tsjinvali.

"Hemos sopesado todas las circunstancias y concluido que todos los puntos del acuerdo firmado con la administración de Eduard Kokoiti han sido cumplidos, si mañana el Parlamento acepta la destitución del presidente del Tribunal Supremo y del fiscal general de la república", exclamó Dzhióyeva ante sus partidarios.

Dzhióyeva y Kokoiti, con mediación de una delegación rusa, firmaron el viernes un acuerdo para poner fin al conflicto entre el Gobierno suroseta y la oposición, surgido tras la anulación judicial de los comicios presidenciales en los que la opositora se alzó con una amplia victoria sobre el candidato oficialista.

En cumplimiento de las condiciones acordadas, Kokoiti renunció anoche a su cargo y envió al Parlamento la propuesta para destituir al presidente del Tribunal Supremo suroseta, Atamaz Bichénov, y al fiscal general, Taimuraz Jugáyev.

Minutos antes de abandonar el poder, sin embargo, el presidente saliente aprovechó su potestad para nombrar a dos jueces del Tribunal Constitucional, algo que no gustó a Dzhióyeva.

Apenas una hora después de la renuncia del líder regional, Dzhióyeva amenazó con retirar su firma del acuerdo del viernes al considerar entonces que Kokoiti había incumplido sus condiciones.

De hecho, las partes acordaron expresamente la destitución del fiscal general adjunto, Eldar Kokoiti, que horas después de dejar dicho cargo fue nombrado como uno de los jueces del Constitucional.

"Ayer exigíamos su destitución y hoy es impuesto como miembro del Tribunal Constitucional. Soy una persona pacífica y busco el compromiso, pero esto es una clara violación del acuerdo", manifestaba anoche Dzióyeva, que hoy fue convencida por sus allegados para que se retirara de la pugna con el oficialismo.

En virtud del consenso alcanzado entre las partes, Dzhióyeva aceptó la anulación de los comicios y la convocatoria de nuevas elecciones para el 25 de marzo, a las que podría concurrir como candidata.

La opositora obtuvo el apoyo de 16.466 electores de un total de 29.053 en los comicios de noviembre, mientras que su rival consiguió 11.286 sufragios.

Las autoridades georgianas niegan legitimidad a las elecciones en Osetia del Sur y reiteran que no pueden tomarse en serio unos comicios en un territorio ocupado por una potencia extranjera.

Tras la guerra de agosto de 2008, cuando el ejército ruso irrumpió en Georgia para forzar a las tropas georgianas a retirarse de Osetia del Sur, Rusia reconoció su independencia, así como la de Abjasia, otra región separatista, y mantiene en ambas contingentes militares.

Al reconocimiento ruso se sumaron más tarde los de Nicaragua, Venezuela y dos atolones en el Pacífico, Nauru y Tuvalu.