La Generalitat vende a los cónsules que la independencia es inevitable

El desafío independentista no es ninguna broma. Es algo muy serio. Así lo demostraron el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, y el consejero de Asuntos Exteriores, Raül Romeva, en una recepción a cónsules extranjeros acreditados en Cataluña.Este encuentro, celebrado el pasado día 10 en el Palacio de la Generalitat, suponía la presentación de Puigdemont y Romeva ante el cuerpo consular acreditado en Cataluña. Allí acudieron en torno a cuarenta representantes de diferentes países para conocer al nuevo equipo del president. Un detalle llamativo es que algunos cónsules se borraron de la cita: en torno al 25% de los que acudieron el año pasado no lo hicieron en esta ocasión en previsión de lo que se iban a encontrar.La recepción supuso todo un aviso a navegantes: Puigdemont y Romeva insistieron en que la independencia es una realidad y que es inevitable. Les transmitieron que se fueran preparando para que Cataluña fuera un país independiente, separado de España. Les dijeron que sería una realidad en un breve periodo de tiempo, en esta misma legislatura.Fuentes diplomáticas explican a lainformacion.com que la sorpresa de algunos cónsules fue mayúscula. Sabían de las intenciones del Govern, pero no se esperaban que fueran a plantear una estrategia tan decidida y, a la vez, tan agresiva en una recepción consular.Uno de los argumentos que los dirigentes de la Generalitat emplearon ante el cuerpo consular para justificar su plan separatista tuvo que ver con las ventajas económicas que supondrían para algunos países comerciar directamente con Cataluña. Destacaron la fortaleza de la región frente a un España que lastra su crecimiento.En esta línea, a finales de enero, Oriol Junqueras concedió una entrevista al Financial Times en la que lanzaba un mensaje a los mercados. El dirigente de ERC dijo que España no es un interlocutor eficiente y fiable, frente a la credibilidad que les podía ofrecer una Cataluña independiente.La representación de la Generalitat en el extranjeroA día de hoy, la Generalitat de Cataluña mantiene oficinas abiertas en más de un centenar de países. La mayoría son Delegaciones del Gobierno u Oficinas en el Exterior (las llamadas embajadas), aunque también hay otros organismos, como el Instituto Ramón Llull, la comunidad de catalanes en el extranjero o la agencia catalana de cooperación al desarrollo.Consulte a continuación el mapa con la representación catalana en el extranjero: