La lluvia deja desbordamientos de ríos en Vizcaya y Cantabria

  • La situación de Asturias, donde ha tenido que intervenir el Ejército, se ha extendido por el Cantábrico y las precipitaciones intensas del miércoles han provocado crecidas en los ríos, debordamientos y desprendimientos de tierra en Cantabria y País Vasco.

Más de 300 incidencias en toda Cantabria por la lluvia
Más de 300 incidencias en toda Cantabria por la lluvia
Agencias

La lluvia cayó este miércoles de forma intensa e incesante durante todo el día en Vizcaya, donde se desbordó la ría a su paso por Bilbao, así como diferentes ríos de la provincia, mientras que en Cantabria los servicios de emergencias actuaron ante el desbordamiento de varios ríos, los múltiples desprendimientos de tierra y las inundaciones provocadas por las precipitaciones.

En Vizcaya se contabilizaron en algunas zonas 103 litros por metro cuadrado desde primeras horas del día. De hecho, el departamento vasco de Interior activó a primera hora de la tarde el nivel 1 del Plan Especial de Emergencias ante el riesgo de inundaciones por la situación de los cauces de los ríos.

En Bilbao, la ría se desbordó levemente en la plaza del Arriaga, y también en Olabeaga, Ribera de Deusto, Elorrieta y Mercado de la Ribera en la hora de la pleamar (20:30 de la tarde).

Ante la persistencia de la lluvia, el Ayuntamiento convocó una mesa de crisis y como medidas preventivas colocó sacos terreros en la zona del casco viejo y Zorrozaurre, y  recomendó el cierre al público de los comercios y la retirada de los vehículos aparcados a ambas márgenes de la ría, tanto en superficie como en garajes subterráneo.

Hasta el momento, las incidencias registradas en Bilbao consisten en balsas de agua en el monte Caramelo y calle Morgan, y un desprendimiento en el monte Arraiz. Efectivos municipales también rescataron a una persona atrapada en su vehículo en una balsa de agua en el barrio de Buiagoiti.

La situación también es crítica, según la Ertzaintza, en la cuenca del río Butrón, en la que se incluyen los municipios de Mungia, Gamiz, Fika y Gatika, donde una mujer fue rescatada a primera hora de la tarde de su vivienda.

También a primera hora de la tarde se desalojó a los trabajadores del polígono Lezama-Legizamon, en Basauri, por su cercanía al tramo donde el río Ibaizabal desemboca en el Nervión, y se está vigilando la cuenca del río Asua.

A lo largo del día también se registraron algunos desbordamientos del río Cadagua a su paso por Alonsotegi y Güeñes, y un árbol cayó sobre la catenaria de Feve entre Zaramillo y La Quadra, lo que afectó a la circulación de los trenes de cercanías entre Bilbao y Balmaseda.

En el municipio de Getxo, el Ayuntamiento cortó varias carreteras y los bomberos están actuando con motobombas en varias viviendas y garajes por el desbordamiento del río Gobela.

Esta circunstancia obligó al realojamiento de once personas de viviendas afectadas de la Avenida de los Chopos, Larrañazubi y Acacias, según consta en la página web del consistorio.

En Barakaldo, la carretera N-634 ha quedado cortada en el límite entre este municipio y Trapagaran debido a las balsas de agua, según ha informado el Ayuntamiento baracaldés.

En Basauri, el río Nervión se desbordó en la calle Fernando Barquín, según un portavoz de la Policía Municipal, mientras que la carretera BI-625 se ha cerrado al tráfico, que se desvía por la autopista, a la que se ha librado del peaje en ese tramo, según la Policía Autónoma.

Más de 300 incidencias en Cantabria

Por su parte en Cantabria, los servicios de emergencia intervinieron en más de 300 incidencias, provocadas por la lluvia caída en la región, especialmente en la zona occidental, donde se registraron hasta 72 litros por metro cuadrado en 24 horas.

La alerta saltó a primera hora de la mañana del miércoles cuando se inició la crecida de los ríos Deva, Saja y Nansa, que se desbordaron a su paso por las localidades de Unquera, Muñorrodero y Villanueva de la Peña, en la zona occidental.

Sobre el mediodía se sumaron los ríos Pas y Asón, en la zona centro y oriental, y ya por la tarde el Sámano y el Agüera, también en el occidente cántabro.

El desbordamiento de estos ríos provocó importantes inundaciones en varias localidades y la evacuación de más de veinte personas en Caranceja, Unquera, Renedo de Piélagos y Castro Urdiales.

Hasta veinte carreteras autonómicas se han visto afectadas por las lluvias, con cortes totales o parciales, como la Nacional 621 y la 634. La Consejería de Presidencia del Gobierno de Cantabria, encargada del Servicio de Protección Civil, mantiene aún activado el nivel I del Plan Territorial de Emergencias de Cantabria.

Por su parte, en Asturias el Ejército se ha movilizado para paliar los efectos de las inundaciones registradas en los últimos días por las crecidas en ríos y embalses. Así, la Unidad Militar de Emergencias (UME) trabaja en labores de achique de agua y lodos en el Hospital de Arriendas, y un segundo elemento se está desplazando hacia la zona afectada.

En total, son 50 los efectivos que colaborarán a paliar los efectos de las inundaciones, con medios formados por 20 vehículos ligeros y pesados, entre ellos, 8 autobombas, 1 máquina de ingenieros y una extractora de agua y lodos.

20 muertos en Francia

Por otra parte, en el sureste de Francia el temporal ha causado al menos 20 muertos, según los últimos balances, que dan cuenta de centenares de personas damnificadas y graves daños.

Las lluvias torrenciales que inundaron varias localidades del departamento de Var provocaron once muertes en una de ellas, Draguignan, aunque todavía no se conocen las cifras definitivas de personas fallecidas por el temporal. La mayoría de los muertos son ancianos que no pudieron hacer frente a las consecuencias de las lluvias torrenciales.

Casi 100.000 hogares continúan sin suministro eléctrico y cerca de un millar de personas permanecen en centros de acogida, organizados por las autoridades locales para recibir a la gente cuyas viviendas resultaron afectadas por las inundaciones.

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