La magistrada Ángela Murillo roba el protagonismo a Otegi con sus frases

  • Madrid.- La magistrada de la Audiencia Nacional Ángela Murillo, que preside el juicio por enaltecimiento del terrorismo a Arnaldo Otegi, ha conseguido con sus intervenciones robar el protagonismo al ex portavoz de Batasuna, hasta el punto de llevarse los titulares que, a priori, estaban destinados al acusado.

La pareja de Sagarduy dice que el acto en el que participó Otegi fue político y no un homenaje
La pareja de Sagarduy dice que el acto en el que participó Otegi fue político y no un homenaje

Madrid.- La magistrada de la Audiencia Nacional Ángela Murillo, que preside el juicio por enaltecimiento del terrorismo a Arnaldo Otegi, ha conseguido con sus intervenciones robar el protagonismo al ex portavoz de Batasuna, hasta el punto de llevarse los titulares que, a priori, estaban destinados al acusado.

Así sucedió ayer, durante primera sesión de la vista, cuando la abogada de Otegi, Jone Goirizelaia, reveló que su representado secundaba las protestas anunciadas a principios de este mes por el colectivo de presos etarras y que estaba en huelga de hambre desde el pasado lunes.

La letrada solicitó permiso al tribunal para entregar una botella de agua al acusado, a lo que Murillo respondió: "Como si quiere beber vino".

Algo después, y cuando había finalizado el interrogatorio a Otegi, la magistrada hizo uso de su potestad para plantear preguntas a los acusados y emplazó al ex portavoz de Batasuna, que había aprovechado su declaración para hacer un discurso político, a decir si condenaba o no "rotundamente" la violencia.

"No voy a contestar", fue la respuesta de Otegi, que Murillo apostilló diciendo: "Ya lo sabía".

La segunda sesión de la vista, celebrada hoy, ha deparado varias situaciones similares, a cuenta esta vez de las dudas que -cinco años después de los hechos que se juzgan- las partes albergan sobre lo que realmente dijo Otegi durante el homenaje al preso etarra José María Sagarduy.

Tras visionar varias grabaciones del acto celebrado en Amorebieta (Vizcaya), Murillo ha pedido a la intérprete de euskera de la Audiencia Nacional que le tradujera la frase que aparecía en la pancarta que presidía el escenario, y ésta ha dicho: "Liberad o soltad a Gatza".

Goirizelaia ha considerado errónea la traducción y la intérprete ha precisado entonces que "Askatu Gatza" significa "Libertad para Gatza" y ha pedido perdón a la defensa, actitud que Murillo le ha reprochado diciendo: "Aquí no tiene que pedir ningún perdón a nadie".

La abogada de Otegi ha señalado entonces que las acusaciones contra éste están basadas en unas manifestaciones que "ahora dicen que no saben lo que significan", y la magistrada ha venido a admitirlo al comentar: "Lo que es evidente es que la sala no ha entendido ni papa".

Murillo ha intentado solucionar la situación suspendiendo la vista y pidiendo a la defensa que mañana aporte su propia traducción, pero aún ha tenido tiempo para colar otra de sus frases cuando Goirizelaia ha dicho que no sabía si le daría tiempo y le ha replicado: "Hombre, si fuera El Quijote, pero para un trocito...".

Ángela Murillo, nacida en Almendralejo (Badajoz), se convirtió en abril de 2008 en la primera mujer en ser nombrada presidenta de una sección de la sala de lo penal de la Audiencia Nacional, tribunal en el que también fue la primera mujer magistrada, hace ya 17 años.

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