La Policía Local socorre a un niño atrapado por la cuerda de una persiana

  • La Policía Local de Sevilla socorrió ayer a un niño de cuatro años de nacionalidad rumana que estaba solo en su casa y se quedó atrapado por el cuello con la cuerda de una persiana, tras lo cual detuvo a su padre imputado por un presunto delito de abandono de menores.

Sevilla, 2 may.- La Policía Local de Sevilla socorrió ayer a un niño de cuatro años de nacionalidad rumana que estaba solo en su casa y se quedó atrapado por el cuello con la cuerda de una persiana, tras lo cual detuvo a su padre imputado por un presunto delito de abandono de menores.

Fuentes municipales han informado hoy a Efe de que sobre las 20 horas la Policía recibió varias llamadas alertando de que en un piso de Calle Playa de Estepona se encontraba un niño de unos cuatro años que pedía auxilio desde una ventana.

Cuando los agentes llegaron al lugar observaron que un menor se asomaba desde una ventana con gran parte del cuerpo fuera y con una cuerda alrededor del cuello que le impedía moverse y casi respirar.

Los agentes subieron al domicilio y, tras varios intentos de entrar por viviendas colindantes, optaron por derribar la puerta a patadas para salvar la vida del menor, que resultó ser nacido en Rumanía y de cuatro años de edad.

Una vez dentro, consiguieron liberarlo y una dotación del 061 lo trasladó al Hospital Virgen Macarena de Sevilla para su valoración médica.

Los agentes, tras casi una hora, lograron contactar con el padre del menor, de nacionalidad rumana y de 28 años, quien declaró que solo se había ausentado cinco minutos.

Las fuentes han precisado que este hecho resulta incierto ya que los agentes habían tardado en localizarlo aproximadamente una hora y los testigos de los hechos exponían que el menor llevaba solo al menos otra hora.

Además, según los vecinos, el niño habitualmente se encontraba solo, sin escolarizar y en "circunstancias lamentables" pues su madre llevaba un mes sin aparecer y el padre trabaja en la localidad gaditana de Bornos y sólo acude a Sevilla cada quince días.

Por todo lo anterior, los agentes detuvieron al padre acusado de un presunto delito de abandono de menores y el niño quedó bajo custodia de la Policía Autonómica.

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