La reina Sofía reafirma el compromiso español por mejorar las condiciones de vida de los etíopes

Adis Abeba.- La Reina Sofía ha mostrado hoy su apoyo a los crecientes esfuerzos de la cooperación española para mejorar las condiciones de vida de la población etíope y salvaguardar a las mujeres frente a la violencia y la discriminación social y económica.

Un centro de salud, una ONG que ofrece formación profesional gratuita a chicas jóvenes sin recursos y una casa de acogida para mujeres maltratadas han recibido hoy a Doña Sofía durante su visita a Etiopía, destino prioritario para la ayuda española al desarrollo y uno de los países africanos más poblados y pobres, en el que un 78 por ciento de la población malvive con menos de dos dólares al día.

Uno de los más graves problemas de salud en Etiopía es la malnutrición infantil y España contribuye a combatirla con siete millones de dólares a través del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y UNICEF, que se suman a los cerca de 40 millones destinados a este país dentro de la aportación española al Programa Mundial de Alimentos.

España, que abrió en 2007 una Oficina Técnica de Cooperación en Adis Abeba, colabora con el Gobierno etíope en la prestación de servicios sociales básicos como escolarización, abastecimiento de agua y atención médica, proyectos para los que aporta unos 10 millones de euros anuales, y proporciona cinco millones más a un programa de la ONU destinado a mejorar la red sanitaria del país.

De estas ayudas se benefician, entre otros, 23 centros de salud de Adis Abeba como el que visitó hoy la Reina de España en la zona más alta de la ciudad, donde reciben atención y tratamiento numerosos enfermos de SIDA, tuberculosis y otras enfermedades respiratorias, así como mujeres embarazadas y madres de bebés, muchos de los cuales nacen en sus dependencias de maternidad.

Cerca de cuarenta niños al mes ven por primera vez la luz en este centro, según explicaba, entre elogios a la ayuda española, la enfermera Selamawit Tilaye, una de las profesionales que esperaba a Doña Sofía a la entrada del centro, junto a una representante del ministerio etíope de Salud y los responsables locales de las Naciones Unidas.

Doña Sofía visitó varias consultas de atención primaria, conversó con las madres ingresadas en la maternidad, con las embarazadas que esperaban su turno en el área de cuidados prenatales y con las que habían acudido con su bebé en brazos a la unidad de pediatría, unas modestas instalaciones rodeadas de un pequeño jardín donde niños que empezaban a hablar se acercaban con curiosidad a la Reina.

La apuesta de la cooperación española por fortalecer el papel de la mujer en Etiopía y hacer valer sus derechos quedó de manifiesto en el siguiente punto de la visita: el Centro de Formación Buen Samaritano, donde su fundadora, Elizabeth Abebe, gestiona un conjunto de talleres de aprendizaje en el que chicas sin recursos adquieren conocimientos suficientes para empezar a trabajar.

Elizabeth tan sólo contaba con una carpa de plástico junto a su propia casa cuando fundó junto a su hija esta organización hace siete años para amparar con su propio dinero a 12 jóvenes que vivían en la calle, pero ahora ofrece formación en un nuevo edificio a 120 mujeres de 18 a 25 años y cuenta con el apoyo económico de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo.

Con sus mejores vestidos, las jóvenes ofrecieron a la Reina una festiva bienvenida en el jardín del centro, engalanado para la ocasión, y volvieron a las clases para mostrarla cómo mejoran en sus respectivas especialidades: costura, bordado, peluquería, cuidado de niños, cocina -cooperantes españoles las han enseñado a preparar tortilla de patatas- y reparto de alimentos elaborados.

Los 47.000 euros con que financia España este proyecto han permitido a Elizabeth ofrecer un horizonte de independencia económica a chicas condenadas a la marginalidad y a las que el centro ofrece además nociones de planificación familiar y prevención frente al SIDA.

La Reina comprobó por último la eficacia de la cooperación internacional para ayudar a las autoridades etíopes a proteger la dignidad de la mujer en su visita a una casa de acogida para víctimas de malos tratos, cuya labor España desea reforzar con un incremento de su aportación inicial de 15.000 euros.

Este centro ofrece vivienda, asistencia médica y asesoramiento legal a 49 mujeres, algunas de ellas con hijos, y acoge a víctimas de agresiones brutales, como una mujer enterrada viva cuyo cuerpo descubrieron casualmente unos niños y que hoy, incapaz de superar su trauma, fue consolada por la Reina con gestos y palabras de cariño y comprensión.

El ambiente optimista del proyecto dominó en todo caso la visita, durante la que organizadores y mujeres acogidas ofrecieron a Doña Sofía y sus acompañantes una fiesta de despedida con música, bailes y café recién tostado.